Hoy, os traemos un
artículo muy especial para nosotros, que hace años habríamos creído imposible
alcanzar, pero que gracias a la enorme labor y entrega de cada uno de mis
compañeros cuervos semana tras semana, hemos llegado a la entrada número 200
del blog. Si nos lleváis siguiendo desde hace tiempo, seguramente recordaréis el «¡Especial: Entrada número 100!», en el que nuestro querido director Jesús
Mesado, nos entrevistó a todos los cuervos. Pues bien, ahora una servidora ha tomado
prestada esa entrevista y le voy a conceder la oportunidad de responder tanto a
Jesús, como a mis tres queridos compañeros: Cristina de la Torre, Elías Santos y Pablo C. Millán, que por aquel
entonces aun no eran parte de esta gran familia.
Me gustaría aprovechar,
para agradecer a cada uno de mis compañeros su profesionalidad y el buen rollo
que tenemos, no cambiéis nunca. Sin más dilación aquí tenéis la entrevista.
Pregunta: ¿Qué te
llevó a entrar en el mundillo artístico y literario?
Cristina: Creo que no hay una
sola razón. Siempre he sido una persona con una inmensa curiosidad por aprender
cosas nuevas, por probar nuevas experiencias y amante del arte en general y de
la literatura en particular. Así que supongo que el mundo de las letras fue
algo que siempre quise explorar y donde he ido adentrándome poco a poco.
Elías: Como ilustrador,
mi primer contacto con el arte fue un poco como el de todo el mundo, es decir,
de pequeño, que te ponen ahí a dibujar en el colegio y tú experimentas
libremente con los lápices de colores. La diferencia es que en mi caso aquello
se terminó convirtiendo en una droga. Dibujar para mí se volvió adictivo, pasó
a ser algo que no podía parar ni controlar. Era una sensación extraña, casi
como si mi mano tuviera vida propia e hiciera ella todo el trabajo. Dibujaba
constantemente y cuando me ponía a ver series de animación o cómics de la
época, la cosa se agravaba porque inmediatamente después sentía como la
necesidad de dibujar lo que veía, inventándome mis propias historias. Ante este
panorama pronto comprendí que tenía que dedicar mi vida al arte.
Pablo: Desde niño he sido muy aficionado a la lectura, de comics
y novelas. Pasatiempos que sembraron en mí el gusanillo de la escritura con el
transcurso de los años. Aunque no fue hasta bien pasada la treintena cuando vi
mi primer relato publicado en papel.
Jesús: Desde niño mi sueño era algún día ser escritor y,
comencé a escribir historias con nueve años, siempre he tenido muchísima imaginación.
Después en la adolescencia y en la veintena, me inicié en el mundillo de los
juegos de Rol (principalmente como Director de Juego) y durante en las noches
escribía fanfics de diferentes series de anime o videojuegos. Cuando tenía
veintinueve años, atravesé una etapa depresiva que duró meses y fue la
escritura la que me hizo superarla. Entonces, decidí que podría luchar por
escribir historias más especializadas para algún día publicarlas y, fue Lorena
Gil Rey con Vuelo de Cuervos, quien me abrió algunas puertas.
P: Háblanos un
poco de ti para que los lectores te conozcan. ¿A qué te dedicas fuera del
ámbito artístico y literario? ¿Y Cuáles son tus hobbies?
Cristina: En mi vida muggle, como
me gusta llamarla, soy profesora de inglés; un trabajo que disfruto bastante,
ya que siempre intento que mis alumnos se lo pasen genial en clase mientras
aprenden. Además, soy mami de una pequeña futura paleontóloga amante de los
dinosaurios, los unicornios, la fantasía y los superhéroes. También tengo un
podcast sobre cine y literatura llamado «Always in Wonderland» en el que charlo
con dos personitas tan locas como yo sobre cosas que nos apasionan.
Elías: Formo parte del
equipo de una editorial almeriense llamada Ediciones Arcanas, donde creo y
maqueto portadas, y también trabajo como freelance en todo tipo de proyectos
artísticos que me van llegando. En cuanto a mi tiempo libre lo dedico sobre
todo a jugar videojuegos, es otro mundo que me apasiona.
Pablo: Trabajo como asesor
comercial en el sector financiero, algo que poco o nada tiene que ver con el
sector artístico, aunque es lo que paga las facturas. Respecto a mis aficiones,
me encanta la lectura, el cine, viajar siempre que el bolsillo lo permita y los
videojuegos.
Jesús: Pues enfoqué mis
estudios en aprender a manejarme con los ordenadores, así que podría decirse
que después de tantos años soy informático, algunas clases particulares también doy cuando me es posible. Aunque, la mayoría de mis trabajos
han sido de cara al público. Respecto a mis hobbies, durante muchos años
principalmente han sido los juegos de rol y los videojuegos, pero por desgracia
últimamente apenas puedo disfrutar de ambos.
P: ¿Crees que se
le da a la cultura la importancia que merece? ¿Qué harías para que la tuviera
si estuviera en tu mano?
Cristina: Rotundamente NO. En la pandemia quedó más que demostrado que la cultura
es lo primero a pasar a segundo plano ante las adversidades, siendo sin embargo
lo más necesario a veces para mantener la cordura.
Si estuviera en mi mano, supongo que empezaría por acercarla más a los más jóvenes. Ellos son el futuro y es en quienes debemos reforzar más la concienciación. En los colegios la cultura se acerca de una forma aberrante, con literatura aburrida para los peques y música teórica a la que no quieren acercarse.
El arte debería ser más práctico. Poner a los niños a experimentar con música, instrumentos, dibujo, poesía, cuentos,... pero eso conlleva un esfuerzo que pocos están dispuestos a asumir.
Elías: Para nada se le
da la importancia que merece y más en una sociedad donde se premia la
mediocridad. La cultura abre la mente, te enriquece y te hace ser libre, y eso
no interesa. A la sociedad no le interesa que pensemos, no quiere que seamos
diferentes, ni críticos, solo necesita
fotocopias, gente de «calidad media» con roles predeterminados que simplemente
sea productiva y siga ordenes sin rechistar. Así si una de esas copias no es
útil es muy fácil reemplazarla por otra que sí lo sea pero no haga preguntas.
La verdad es que no sé
muy bien que se podría hacer para romper éste circulo vicioso en el que hemos
entrado, pero lo que tengo claro es que habría que empezar por la base:
nuestros hijos. Básicamente animarles a que sean ellos mismos, incitarles a que
exploren sin miedo a equivocarse, defender que sean diferentes, impulsar su
creatividad, etc. Y aparte, habría que reconocer a la cultura como un bien de
primera necesidad.
Pablo: No, definitivamente no.
Hace poco leí por ahí que había un proyecto de relegar prácticamente al olvido
la asignatura de Filosofía, desapareciendo del cuadro de materias optativas
ofertadas. Creo que la educación y la cultura van unidas de la mano y flaco
favor se hace a las nuevas generaciones si aquellos que legislan suprimen poco
a poco de las aulas las disciplinas de humanidades. Mi miedo es que esta medida
se extienda de forma paulatina al resto de asignaturas de letras, que para mí
son la piedra angular de nuestra identidad cultural. Cosas que yo haría, pues
trataría de fomentar aún más la creación de talleres literarios entre los más
jóvenes.
Jesús: Desde luego que no se
le da la importancia que merece. Vivimos en una sociedad en la que la mayoría
de sus individuos no se dan cuenta del inmenso valor que tienen los libros, el
arte, entre otras muchas cosas y que para muchas personas pasan desapercibidas.
Si estuviera en mi mano, haría todo lo posible porque en las escuelas a los
niños se les enseñará la literatura y el arte como algo esencial, demostrándoles que se
puede disfrutar mucho.

Cristina de la Torre
P: ¿En qué
proyectos literarios te has embarcado desde que iniciaste? ¿Y mantienes la
misma ilusión con la que comenzaste en esto?
Cristina: Pues he hecho varias
cosillas, pero, si soy sincera, espero que lo mejor esté por llegar. Empecé
haciendo trabajillos de corrección en proyectos solidarios y escribiendo para
algunos blogs. Mi primer relato, «Reflexión», fue publicado en una antología
solidaria llamada «Más Macabras», un proyecto feminista en el que me hizo mucha
ilusión trabajar que contaba con una pedazo de portada hecha por nuestra cuervo
especialista en pinceles, María Pizarro.
El año pasado, publiqué
mi segundo relato, «Sonrisas», que puede comprarse en Amazon de forma digital y
que incluye el audio relato.
Ahora estoy más
enfocada en la corrección y en otros proyectos, ya que tengo poquito tiempo
para dedicarle a la escritura. Aunque espero de corazón volver a ello algún día
no muy lejano. Creo que jamás perdería la ilusión por crear de una forma u
otra.
Elías: Sería muy largo
enumerarlos todos. Desde mi inicio profesional, hace ya como una década, gran
parte de mi trayectoria artística ha estado relacionada con el mundo literario,
a eso suma que llevo alrededor de unos seis años trabajando para una editorial
y entenderás que ya he perdido la cuenta de cuantos libros llevo ilustrados.
Eso sí, mantengo la misma ilusión que el primer día porque, como ya os
comentaba más arriba, para mí el arte es una droga y terminar un nuevo trabajo
es la dosis que me calma.
Pablo: Por el momento he
ceñido mi actividad como autor a los relatos, lo que me ha llevado a participar
en distintas antologías; la última «Dark West», publicada este año por la
editorial Suseya, donde comparto autoría con buenos colegas de las letras. Respecto a la segunda pregunta, desde luego
que mantengo la misma ilusión con la que comencé a escribir, sobre todo si
algún lector me hace saber que ha disfrutado en mayor o menor medida con
algunos de mis retoños literarios. Y lo más importante es tener siempre en
mente nuevas aspiraciones.
Jesús: Pues comencé con
pequeños relatos de terror, pero fue en 2015 cuando logré publicar los dos
primeros en dos antologías: «En los albores del Miedo» de Dolmen Editorial y «Hijos del Mal» de Egarboook. También comencé a publicar relatos en la revista de Vuelo de Cuervos
y durante unos años participé en casi una treintena de antologías de
Microrrelatos, la mayoría con la editorial Diversidad Literaria, con quien también he colaborado en varios y diversos proyectos literarios.
Aunque, fue en septiembre
de 2017 cuando cumplí mi sueño de publicar mi primer libro: «El Samurái de Vallecas», cual lo hice de manera autopublicada y que no tiene nada que ver con el terror. Luego, en octubre de 2018 publiqué su
continuación «El Samurái de Vallecas 2: El Camino hacia la Victoria», debido a la acogida que tuvo el primer libro.
P: ¿Cuál es tu
libro favorito? ¿Y tu película favorita?
Cristina: «El señor de las moscas» y «La vida es bella».
Elías: Hay un relato
corto postapocalíptico escrito por Harlan Ellison que siempre recomiendo, se
llama «No tengo boca y debo gritar». Es muy retorcido. En él se juntan el terror
y la ciencia ficción de forma perfecta, y son géneros que siempre me han
fascinado. Además hicieron un videojuego basado en ésta historia, una aventura
gráfica del 95, que salió bastante maja y creo que el libro también fue
adaptado a cómic así que tenéis donde elegir. En cuanto a la peli favorita,
tengo muchas, pero si alguna destaca por encima de todas podría ser Jurassic
Park. No sé cuantas veces habré visto esa película y lo mejor es que nunca paro
de disfrutarla.
Pablo: ¡Uf!, ¿Solo una
película o libro favoritos? Lo siento, pero en esto no me mojo, tengo decenas
en ambos campos. Te enumero un puñado de cada. De películas: El padrino, El
exorcista, Alien, La guerra de las galaxias, Tiburón, Rocky, En busca del arca
perdida, Los siete samuráis, Los santos inocentes, Psicosis, El caballero
oscuro, Akira, Celda 211, Los otros, La caza, La chaqueta metálica… y podría
nombrar cien más. ¿Libros? La historia interminable, Carrie, El silencio de los
corderos, Libros de sangre, Muerte en el Nilo, Estudio en escarlata, Los
pilares de la Tierra, Olvidado Rey Gudú, El club Dumas, Rimas y leyendas de
Bécquer… y además añado a esta selección series de televisión como Mindhunter,
Dexter, CSI Las Vegas, Perdidos, la ochenteras V y Miami Vice, Breaking Bad,
Peaky Blinders… y, por supuesto, Bola de Dragón (sé que esto te ha tocado la
fibra, Jesús).
Jesús: Pues libro favorito
como tal no tengo, pero si tengo que decantarme por uno al que tengo mucho
cariño, es el Libro de Nod. Este libro está basado en el archiconocido Mundo de
Tinieblas que desarrolló White Wolf allá por los años 90 para sus juegos de rol. En concreto, formaba parte de su universo de Vampiro, y era como la
biblia de los hijos de Caín.
Respecto a mi película favorita,
es sin dudas «El Club de la Lucha» de David Fincher, basada en la novela que
escribió Chuck Palahniuk. He de decir que el libro es una maravilla literaria, que por supuesto he leído varias veces, pero la película creo que la he podido ver más de trescientas o cuatrocientas veces y no me cansa, al contrario, la disfruto aún más.
P: ¿Estás
actualmente trabajando en algún proyecto artístico o literario? Si es así,
cuéntanos un poco en que consiste dicho proyecto.
Cristina: Ahora mismo tengo la escritura algo aparcada (a excepción de lo que
escribo para este blog), ya que me estoy centrando más en retomar la lectura.
He pasado por un periodo de bloqueo lector con el que estoy batallando y al que
empiezo a ganar terreno. Y el poquito tiempo que me sobra, ahora mismo lo estoy
centrando en el podcast.
Elías: Estoy trabajando
en varias cosas que si os las digo tendría que mataros inmediatamente después
¡ja, ja! No, bueno, ya sabéis, son proyectos que hasta que no se revelan no
puedes hablar de ellos, pero en su mayoría son cosas relacionadas con libros.
Aparte tengo movidas personales en mente, quiero meterme en el mundo de la
creación de videojuegos y estoy trabajando duro para conseguirlo, preparando
muestras, participando en proyectos indie, etc. Está siendo muy divertido.
Pablo: Sí, después de un parón de casi un año, por motivos
profesionales y académicos, a los que se ha unido una pequeña crisis creativa,
estoy volcado con el borrador de mi segunda novela. Si todo va bien, para
finales de verano debería de estar lista. Luego tocará dejarla reposar,
corregirla y moverla por las editoriales, aunque sin prisa. Por otro lado, mi
primera novela, terminada desde hace un par de años, debería de ver la luz el
año próximo.
Jesús: En la actualidad llevo
un tiempo con un bloqueo de escritura, digamos que no estoy atravesando una buena
etapa en lo personal. No obstante, tengo al menos dos proyectos que si la cosa va bien
tendrían que ver la luz este año. Al menos uno si lo hará seguro, el otro no lo
tengo tan claro. El primero es una antología de relatos ambientada en Japón que
coordiné junto a Lorena Gil Rey en la que contendrá dos relatos míos, el otro
es un proyecto más personal con una serie de relatos propios de terror la
gran mayoría, pero también toco otros temas. Y hasta ahí puedo decir.
Elías Santos
Ahora vamos a
centrarnos en vuestra faceta como cuervos.
P: ¿Qué significa
para ti Vuelo de Cuervos?
Cristina: Para mí, Vuelo de Cuervos significa alas. Creo que es una bonita
metáfora. Al ser un cuervo y haberme convertido en una de estas oscuras aves,
también he recibido la oportunidad de expresarme y de volar junto a personas
increíbles. Dejar libres al viento las ideas que rondan mi cabeza a menudo.
Elías: Para mí Vuelos
se ha convertido en un lugar donde descubrir nuevas e interesantes obras y
autores, gracias a mis compis, y un rinconcito donde poder explayarme sobre un
tema que me encanta; los videojuegos.
Pablo: Vuelo de Cuervos es la
familia que me abrió las puertas en este mundillo y los primeros en darme una
oportunidad. Con Vuelo de Cuervos, tanto en su revista como en sus antologías
digitales, hice mis primeros pinitos en la escritura y conocí a gente
maravillosa de la que aprendí mucho.
Jesús: Para mi Vuelo de Cuervos fue como una puerta que se me
abrió cuando yo quería dar mis primeros pasos para publicar, y estando perdido,
encontré una persona que me ha guiado, me ha ayudado, y, sobre todo, ha confiado
en mí. Por eso este es ahora mi hogar, los cuervos son una familia para mí, una familia
que aún tiene mucho camino que recorrer juntos.
P: Háblanos un
poco de tu función dentro de Vuelo de Cuervos y cuéntanos como sueles gestionar
tu trabajo para el blog.
Cristina: Mi trabajo en el blog
empezó siendo como reseñadora de clásicos. Sin embargo, debido a este bloqueo
lector, me empecé a centrar más en la sección de entrevistas, en la que me
gusta conectar con personas que me parecen interesantes. Tengo previsto darle
una vuelta de tuerca a esta sección próximamente, pero prefiero no desvelar
nada aún. Además, estoy en proceso de crear una nueva sección sobre cine. Pero
paso a paso. Mis alas tienen muchas ganas de seguir volando en varias
direcciones dentro de este vuelo.
Elías: Mi cometido es
hablar de videojuegos. Concretamente lo que hago es completar todo aquel juego
que me llama la atención, sea novedad o no, y después expongo mis impresiones.
Lo que comúnmente se conoce como análisis de videojuegos. La idea es
simplemente hacer llegar la opinión personal de un videojugador normal y
corriente, y si luego eso a alguien le sirve para descubrir algún título o para
salir de dudas de si comprar un juego o no, pues mejor que mejor.
Como esto no es una
página especializada en videojuegos lo que intento es enfocar mis textos hacia
un público más amplio, evitando jerga muy específica o no dando por hecho que
ya sabéis todo de algún título, aunque sea muy famoso. Y mi forma de trabajar
es tener un esquema de los temas que quiero hablar (normalmente son historia,
jugabilidad, gráficos y música) y a partir de ahí pues trato de abordar lo que
más destaque, mencionar los puntos débiles y mojarme diciendo si recomiendo la
obra o no.
Pablo: Dentro del blog llevo una sección de artículos algo
bizarros a la que he ltitulado “Hemeroteca del miedo” donde recopilo y comentó
noticias escabrosas, extrañas y con cierto toque paranormal que han aparecido
en la prensa convencional. Suelo presentar un artículo cada dos o tres meses,
pues con el trabajo y la novela estoy bastante atareado.
Jesús: Pues yo comencé escribiendo un relato para la tercera
revista de Vuelo de Cuervos, relato que iba acompañado de una magnifica
ilustración de mi amigo e ilustrador JLF Caronte. Luego seguí participando en
los siguientes números con un relato y una pequeña sección de juegos de rol. Al
mismo tiempo, entré a formar parte de la directiva, primero como «Coordinador de Eventos, Marketing y
Estrategias Comerciales» lo cual me permitió organizar con ayuda de algunos
compañeros unos pocos eventos en Madrid.
En septiembre de 2020, me convertí en el
director del blog de Vuelo de Cuervos y fue cuando iniciamos esta última etapa
con los cuervos actuales. Respecto a mi papel en esencia ha sido coordinar las publicaciones y marcar los plazos de entrega de los artículos y estar pendiente que semana tras semana se publiquen contenidos nuevos. Por ahora, no me puedo quejar, ya vamos camino de que algunos cuervos cumplan dos años en los que no han dejado de aportar con su gran entrega y profesionalidad. También destacar, que he participado en el blog con algunos artículos, me centré mucho en hablar de videojuegos, ya que nadie lo hacía hasta la llegada de Elías.
P: Desde Vuelo de
Cuervos se ha remarcado en muchas ocasiones que uno de sus principales
objetivos es ayudar a las personas que acaban de iniciarse en el ámbito
artístico o literario para darse a conocer. ¿Piensas que es importante que los
autores o ilustradores más noveles tengan esa oportunidad?
Cristina: Por supuesto. Creo que este es un mundo difícil en el que se necesita un
poquito de luz a veces. Un pequeño foco que te alumbre o que guíe tu camino. O
que, simplemente, te ayude a conocer a gente en el camino. Y me parece genial
que este espacio les haga un hueco.
Elías: Por supuesto,
soy de los que piensan que toda ayuda es poca, con este tema. Hoy en día con
las redes sociales los autores ya tienen ante sí una ventana de exposición al
mundo brutal, pero también es verdad que hay que saber sacarles partido y que
destacar entre tanto ruido es muy difícil. Así que, en ese sentido, un lugar
más «íntimo» como Vuelos pues puede venir de perlas por lo que me parece súper
importante.
Pablo: Por supuesto que hay
que dar una oportunidad a los más nóveles. Afortunadamente existen iniciativas como
el propio blog Vuelo de Cuervos y pequeñas editoriales, como el caso de Arima,
que depositan su confianza en nuevas promesas que de otra forma les habría sido
difícil comenzar.
Jesús: No solo creo que es
importante, creo que es algo esencial y que deberían poner en práctica en otros
blogs. Ya que creo firmemente, que la gente que acaban de empezar en el mundillo
de las letras o el dibujo, son las que más ilusión y ganas le van a poner.
Vuelo de Cuervos nació con esa filosofía y seguirá hasta sus últimos días con
ella.

Pablo C. Millán
P: ¿Cuál es el
recuerdo más especial que tienes de Vuelo de Cuervos?
Cristina: Quizá sea un poco
tonto, pero los recuerdos más especiales que tengo son, en primer lugar, cuando
María pensó en mí como candidata para entrar en Vuelo y me lo propuso. Me hizo
una ilusión tremenda, ya que conocía el blog desde hacía años y me hacía mucha
ilusión además volver a trabajar con ella. En segundo lugar, recuerdo con mucho
cariño cuando me metisteis en el grupo de WhatsApp, bajo la advertencia de que
era un grupo algo loco en el que se decían muchas tonterías. Y que nada más
entrar, tras presentarme y conocer al equipo, me sentí como en casa. Se les
coge mucho cariño muy rápido. Son una familia de cuervos maravillosa.
Elías: No llevo mucho
tiempo por aquí así que aun no me ha dado tiempo a forjar momentos memorables.
Lo que sí que recuerdo con cariño es el día de mi primera publicación. Fue
especial, como todas las primeras veces. Estaba nervioso y con muchas ganas,
además de que me sentí súper arropado por mis compis y fue todo muy
gratificante.
Pablo: Recuerdo con nostalgia la primera vez que tuve la
oportunidad de conocer en persona a varios de los integrantes de la entonces revista
en una quedada en Madrid hace unos años con motivo de un evento literario que
se celebró en Fnac.
Jesús: Tengo muchos, es imposible enumerarlos todos, pero hay
tres muy especiales: Ver publicada la revista número 3 con mi primer relato. El
siguiente fue el evento que hicimos en Julio de 2016 en Madrid, que bautizamos
con el nombre de «Corvus et Draco», que lo organizamos junto con el grupo La
Cofradía del Dragón. Aparte del éxito que supuso, todos los cuervos que estábamos
en aquellos días trabajamos muy duro y también personas amigas nuestras que
ayudaron también sin pedir nada a cambio. El tercero es cuando arrancamos la
nueva y última etapa de Vuelo de Cuervos, con Miriam, María, Josema y Óscar
como nuevos cuervos y un servidor asumía el papel de director del blog.
P: ¿Qué esperas en
el futuro de tu trabajo y el de tus compañeros dentro de Vuelo de Cuervos?
Cristina: Espero seguir mucho tiempo volando con ellos, eso sin duda. Y espero
poder tener más proyectos dentro y fuera de Vuelo de Cuervos donde poder seguir
creciendo todos.
Elías: Pues en general
espero que esto vaya para largo y que poco a poco el proyecto siga creciendo
humildemente. Eso significará que hay interés por la cultura y que no todo está
perdido.
Pablo: Espero aportar mi
granito de arena de manera regular, bien con Hemeroteca del miedo u otra
sección cuando se me agoten las ideas. A la familia que forma el blog le pido
que continúe alimentando la llama de este proyecto que lleva tantos años
apostando por los nuevos autores, concretamente escritores e ilustradores.
Jesús: Yo espero que sigamos haciendo muchas cosas juntos, y que
sigamos siendo una familia unida, de las que se cuidan unos a los otros. No me
importa tanto cuán lejos lleguemos, sino que todos disfrutemos de lo que
hacemos por amor a la cultura. Si ellos están contentos y se sienten a gusto, yo me sentiré satisfecho como director.
P: Y para concluir
con esta entrevista, que le dirías a aquellas personas que no se atreven a dar
el paso para aventurarse escribir o dibujar pero en el fondo de su corazón lo
están deseando.
Cristina: Que vida sólo hay una y que debemos hacer lo que nos gusta. Que ya
bastante mal está el mundo para que no nos atrevamos a crear y a probar lo que
nos gusta. Que la vida pasa y que en el futuro tienen dos posibles caminos: en
el que recuerden esas experiencias, buenas o malas, y sonrían echando la vista
atrás; y en el que al mirar hacia esa dirección se les haga un nudo en el pecho
por el arrepentimiento de no haberlo intentado. ¡Carpe diem!
Elías: Pues les diría
que vayan a por ello de cabeza. Que no piensen en el que dirán o si valgo para
esto o no. Lo sé, es complicado gestionar todo eso y el proceso creativo es
difícil de cojones, pero frustrarse, entrar en cólera porque algo no te sale,
dudar, etc, también es parte del trabajo. Incluso de los callejones sin salida
se aprende algo. Como decía Adam Adamowicz (artista conceptual de Skyrim)
«nunca un diseño es una pérdida de tiempo, aunque solo sirva para indicarte que
ese no es el camino.» No tengáis miedo a fallar, y si el problema es que ahora
mismo no puede ser por temas de la vida (hijos, economía y tal) no os
preocupéis que, como se suele decir, nunca es tarde. Más adelante podría ser
vuestro momento, la cosa es que lo intentéis las veces que haga falta.
Pablo: Les diría que fuera
miedos. Hay que subirse al tren cuando pasa y probarse a uno mismo. Les
recomendaría que se presentaran a pequeños concursos literarios; que hay
bastantes para micro relato y relato corto, una buena manera de perder el miedo
y lanzarse a la piscina antes de acometer empresas más ambiciosas, como la
creación de una novela. Y a los ilustradores les aconsejaría lo mismo. Y, por
supuesto, a unos y otros les plantearía que mandaran sus trabajos al blog Vuelo
de Cuervos, porque no se me ocurre manera mejor de estrenarse en el ámbito
artístico.
Jesús: Si tenéis sueños,
perseguirlos hasta que se cumplan. Luchar por ellos y no os rindáis jamás. Si
os gusta escribir o dibujar, practicar todo lo que podáis, seguramente os caeréis muchas veces,
pero volver a levantaros y tarde o temprano llegará vuestra oportunidad.
Confiad en vosotros mismos siempre.
Jesús Mesado Sánchez
Muchas gracias por responder.
Y aquí concluimos este especial de la entrada 200. Espero, que nos veamos en el siguiente especial y, por supuesto, espero que sigáis disfrutando de mis reseñas literarias y mis artículos.
Artículo y entrevista
realizada por Miriam Ojeda Portero