viernes, 26 de noviembre de 2021

Vuelos Ilustrados 18: Mutafukaz vol. 1: Dark Meat City (Guillaume Renard)

Pues ya toca traeros nuevos cómics con temática un poco más para adultos, ¿No?

Está muy bien los valores que se les inculcan a los pequeños con los ejemplares que suelo reseñar, pero los mayores también necesitamos que nos den caña.

La editorial Dibbuks me mima, y sabe exactamente lo que me gusta. No hace mucho llegó a casa un cómic políticamente incorrecto, con lenguaje soez, y sangre salpicada en cada una de las viñetas que lo componen. Vamos, una auténtica maravilla para el deleite de mi persona, y para todo aquel que sepa apreciar una hostia bien dada.


Agárrense los machos, porque hoy comparto con todos ustedes, mis impresiones sobre:

Mutafukaz vol. 1: Dark Meat City

SINOPSIS:

¡Bienvenidos a Dark Meat City, la ciudad más grande de New California! Una metrópolis compuesta por infinidad de barrios que son controlados por distintas bandas callejeras. Angelino es un joven que comparte piso con su amigo Vinz en una de estas barriadas de mala muerte. Allí conviven con la delincuencia y el malestar, pero un día, mientras intenta ganarse el pan como repartidor de pizza, es atropellado y comienza a tener un terrible dolor de cabeza al que le acompaña un efecto secundario: empieza a ver que las sombras cobran un aspecto un tanto extraño. Lo que no sabe Angelino es que, por otro lado, el equipo de wrestling llamado Lucha Última, se verán envueltos en una encrucijada de proporciones bíblicas que puede suponer el fin de la Tierra tal y como la conocemos.

FICHA TÉCNICA:

Autor: Run
Editorial: DIBBUKS
Nº de Páginas:128 páginas
Ilustraciones: Color y B/N
Tapa: Blanda
Fecha publicación: 1ª Edición Abril: 2021
ISBN: 978841729496

RESEÑA:

Mutafukaz vol. 1: Dark Meat City, es el primer volumen publicado en España de una saga que tiene seis volúmenes en total. A parte de este ejemplar, también son conocidos el spin off, «Mutafukaz. 1886», «Mutafukaz. Loba Loca» y «Mutafukaz. Puta Madre». Este último lo guardo como oro en paño en mis estanterías, ya que, gracias a Puta Madre, conocí el delirante universo de Run. La editorial Dibbuks ya lo publicó en el 2019, en un álbum recopilatorio, donde veríamos una miniserie escrita por RUN, acompañada por los dibujos de Neyef.

En estas páginas conoceremos a nuestro marginado protagonista Angelino y a Vinz, su mejor amigo. Ambos se ganan la vida en un barrio de mala muerte situado en Dark Meat City, la ciudad más grande de New California que apareció después del Big One: un terremoto que destruyó parcialmente California.

Dark Meat City está contaminada, y plagada de pandillas a cuál más chunga, donde las ratas y las cucarachas son las amas de la ciudad.

La vida aparentemente se abre paso entre el caos, y como cualquier otro día corriente, Angelino se incorpora a su precario trabajo, y se dispone a entregar unas pizzas, cuando de repente es atropellado por un camión. Si bien el golpe no lo mata, después de ese día comienza a tener extrañas alucinaciones, que le obligan a visitar a un dudoso médico.

Todo cambia después de dicha visita, y de la noche a la mañana tanto nuestro protagonista como su gran amigo, serán perseguidos por un escuadrón de policías sin razón aparente.

Si os suenan las imágenes de este pequeño cabezón, o la historia en sí, puede que sea porque en 2017 se estrenó un film de animación que tiene el mismo formato gráfico que el cómic.

Esta película nace de una idea original de Guillaume Renard, (nombre real que se esconde tras el pseudónimo de RUN), y está dirigida por el japonés Shoujirou Nishimi. Juntos crean una mezcla de estilo anime franco/japonés, que sinceramente, me parece fascinante. No es de extrañar que ganara el premio de la MPTE japonesa a la Mejor Película de Animación. Os animo a verla si no lo habéis hecho, pero como recomendación, siempre os diré que el cómic es mucho mejor.

Las escenas de lucha mezcladas con el desconcertante humor del autor, forma un conjunto que, al margen de la trama, envuelve al lector hasta sumergirlo en un mundo violento, que esconde una brutal crítica social. Los excelentes paisajes urbanos nos harán conocer los diferentes choques de culturas entre las bandas que los componen, a cuáles de ellas más heterogéneas.

Viñetas estridentes a todo color cargadas de detalles, que contrastan con muchas otras en las que el blanco y negro será el predominante en algunas escenas. Run hace pequeños incisos a modo de voz en off, como si de una película de misterio se tratase, o adjuntará recortes de periódicos que te obligaran a esbozar una sonrisa. Esos pequeños detalles me fascinan, y también considero que pueden sacar del aletargamiento al lector, que no deja de sorprenderse página tras página.

Finalizada la historia, Run nos regala los primeros diseños y bocetos de algunos de los personajes, e incluso nos cuenta de su puño y letra, el proceso de creación de Mutafukaz. Es la primera vez que he visto en un volumen de estas características, fotografías del propio autor, que te ayudan a comprender el trabajo de campo que hay tras la publicación de este cómic.

Por si no fuera suficiente con todo lo que he mencionado, también veremos abundantes ilustraciones de otros artistas a modo tributo de nuestro protagonista Angelino.

Todo ello hace de «Mutafukaz vol. 1: Dark Meat City», un pack muy completo donde historia, calidad, y extras deberían ser el punto de inflexión para muchos otros autores a la hora de publicar.

Si te va Méjico, la lucha libre, las bandas, los marginados, las armas, las leches como panes, o incluso las cucarachas, este es tu cómic.

Encantada con Dibbuks que, a pesar del COVID, y demás obstáculos editoriales, sigue al pie del cañón, con ejemplares tan bien cuidados como este.

SOBRE EL AUTOR:

Grafista e ilustrador apasionado por la ciencia ficción, la cultura Z y la cultura popular latinoamericana, que ha triunfado como guionista de cómic en su propio sello, Ankama.

Fue durante cinco años director artístico de la célebre agencia multimedia Teamchman, donde fue un precursor de contenidos por Internet y trabajó en proyectos publicitarios para grandes marcas (Warner Music, Swatch, Adidas...). En 2002 su cortometraje Mutafukaz opération blackhead, anuncio del cómic del mismo título, dio la vuelta al mundo y obtuvo una nominación en el Sundance Film Festival de Salt Lake City. Desde 2006, RUN trabaja en la editorial francesa Ankama, donde ha publicado el primer tomo de Mutafukaz. En el año 2008 lanzó el sello Label 619, donde reunió a los peores crápulas del cómic, como Florent Maudoux o Guillaume Singelin. Su última obra es The Grocery, en 2015. 

Fotos: Dibbuks, Tebeosfera

Reseña escrita por María Pizarro

viernes, 19 de noviembre de 2021

Don’t Forget Me

Hoy os traigo un artículo muy especial para mí que espero que disfrutéis mucho a pesar de salirse un poco de la temática habitual de este nuestro nido de cuervos. Los asiduos al blog sabréis que suelo pasar por aquí para hacer entrevistas o para reseñas sobre clásicos. Hoy, sin embargo, he cambiado de rama posando mis garras en un tema musical, pero no uno cualquiera; he estirado mis plumas para hablar del que es, desde que tengo uso de razón, mi grupo favorito.

Probablemente os estaréis preguntando, ¿y a qué viene que nos cuentes ahora tu vida o la del grupo en cuestión? Pues esto se debe, queridos lectores, a que hace unos días esta servidora se topó de bruces con un artículo de un periódico al que no voy a mencionar aquí comentando por qué las entradas de la nueva gira de este grupo se habían agotado en tan poco tiempo. ¡Todo un gran logro, sin duda! Sin embargo, leí cada cosa… leí cada insensatez… leí cada patochada… que entre graznidos juré que haría un artículo que DE VERDAD hablase de los porqués de este acontecimiento (era eso o sacarle los ojos a picotazos al escritor de semejante insulto al periodismo). Pero va siendo hora ya de que os diga de qué grupo os hablo. Y no es otro que RED HOT CHILI PEPPERS.

A lo largo de mi vida no he conocido a mucha gente que sea muy fan de la banda, pero casi todo el mundo conoce al menos una o dos canciones de ellos (Californication, By the way, Give it away, Under the bridge…). Pero los que somos muy fans del grupo estamos viviendo un momento ahora que creo que pocos podemos describir.

El pasado 24 de septiembre, el grupo liderado por Anthony Kiedis subió a todas sus redes un vídeo de lo más curioso. El cantante y el bajista, Michael Balzary (Flea), aparecían “disfrazados” de presentadores de un noticiario; el batería, Chad Smith, hacía su aparición como el hombre del tiempo y en un momento del vídeo, un momento en el que os juro que se me saltó el corazón, aparece el esperadísimo John Frusciante haciendo de sí mismo, como guitarrista del grupo, anunciando ni más ni menos que una nueva gira que daría comienzo en junio de 2022; noticia tras la cual los dos “presentadores” se vuelven locos al más puro estilo Red Hot. Os dejo el vídeo por si queréis verlo, no tiene desperdicio:

Tras esta noticia, por la que muchos gritamos (literalmente, os prometo que grité… varias veces…), sacaron otro vídeo del estilo unos días después anunciando ya ciudades y fechas; siendo SEVILLA el primer destino de esta gira mundial de la banda. Sí, Sevilla. Y allí estaré yo. Pero voy a intentar contener mi lado fangirl (un ratito al menos) para centrarme en el meollo de este asunto. ¿Por qué es TAN importante esta gira y por qué las entradas han volado tan rápido?

Me vais a permitir que me remonte unos añitos atrás. Prometo intentar resumir, no os contaré cuando Anthony y Flea se conocieron en el instituto Fairfax porque uno estaba haciendo bullying y el otro se encaró con él. Que oye, si queréis que os cuente más sobre el grupo, yo encantada de hacer mil artículos sobre ellos, pero en otra ocasión. La banda original, formada en 1983 bajo el curioso nombre súper sencillo de recordar de Tony Flow and the Miraculous Magestic Masters of Mayhem, pasó a llamarse Red Hot Chili Peppers en 1984, cuando publicaron su primer álbum con el mismo nombre. En su origen, los integrantes eran Anthony Kiedis (cantante), Michael Balzary -Flea- (bajo y trompeta), Hillel Slovak (guitarra) y Jack Irons (batería). Aquí comienza la primera etapa del grupo, con tres discos muy muy funkys que acabó tras la trágica muerte de Slovak en 1988 por sobredosis.

Tras este palo, del que especialmente Anthony tardó mucho en recuperarse, entrando por segunda vez en rehabilitación por consumo de heroína, Flea se encargó de hacer pruebas para nuevos integrantes. Fue ese el año en que Chad Smith sustituyó a Irons en la batería. Y fue entonces cuando Flea, bendito sea siempre, recordó a un muchacho con el que había coincidido, un chico que era muy fan de la banda, muy seguidor del trabajo de Slovak y con el que había tocado en alguna ocasión informal. Así fue como Flea invitó a John Frusciante a entrar al grupo. Así, amigos, nació LA MAGIA.

Comienza aquí la segunda etapa de la banda, que en 1989 saca un disco llamado Mother’s Milk (sí, como el personaje de The Boys y eso que tanto le gusta a otro personaje de The Boys). Y tras este disco llega el que para mí es el quinto integrante esencial del grupo, aunque no oficial y menos conocido: Rick Rubin. Este productor, declarado en 2007 como el productor más importante de los últimos 20 años por MTV, fue un antes y un después para Red Hot Chili Peppers. Y es que Rubin captó la sinergia que había entre estos cuatro integrantes, los metió en una mansión durante unos meses, donde pensó que aumentaría su creatividad mucho más que en cualquier estudio de grabación, y allí crearon su primer gran disco: Blood Sugar Sex Magik. En este disco se desprenden un poco del funky y del gamberrismo que tenían (aunque nunca del todo) para hacer un disco mucho más profesional, más cuidado, con una composición exquisita. Rubin, además, les consigue teloneros para las giras de la talla de Nirvana o Pearl Jam. Aquí, mi yo de 3 o 4 añitos, al escuchar este discazo en un cassette que tenía mi madre, empezó a ser fan del grupo. Sí, a esa edad ya me enamoré de ellos y de canciones como Give it away (que reconozco que me gustaba más entonces que ahora) o la que hasta el día de hoy sigue siendo mi canción favorita, Under the bridge.

Sin embargo, cuando todo parecía estar en el punto álgido del grupo, cuando al fin habían conseguido alcanzar esa profesionalidad, ese sonido especial, esa energía increíble, John Frusciante empezó a sentirse muy afectado por todo lo que el abrumador éxito de la banda les había traído. Entró en un estado de ansiedad y depresión hasta el punto de sabotear los conciertos. Fue entonces cuando Flea habló con él, preguntándole si quería seguir en el grupo. John contestó que no, pero que seguía porque le encantaba tocar con ellos y en especial con Flea. La compenetración que tenían (tienen y tendrán) estos dos músicos es algo que pocas veces se ha visto en la historia. El bajista, sin embargo, le dijo que esto no era razón suficiente para continuar, por lo que quizá fuese mejor que se marchara. Frusciante permaneció algo más en la banda, pero acabó marchándose en mitad de una gira por Japón, algo que afectó mucho al ambiente dentro del grupo. Os dejo aquí un vídeo de uno de los conciertos en los que John se pone a gritar de forma horrible a propósito para sabotear a la banda. La cara de odio de Anthony no tiene desperdicio. Id sobre todo a la parte final:

Tras la marcha del guitarrista, quien pasó sus peores años bajo una terrible depresión, hundido en las drogas y que le llevó incluso a quemarse los brazos, vender todas sus pertenencias y perderlo todo en un incendio; el grupo reclutó a Dave Navarro para que tomara las riendas de las cuerdas. Resumo esta etapa y el disco de One Hot Minute, el único disco que sacaron con Navarro, parafraseando a mi bajista favorito: “Dave Navarro es un gran guitarrista, es una gran estrella del rock. Pero, simplemente, no nos entendíamos.” Y es que el propio Dave Navarro llegó a decir que se sentía un intruso dentro del grupo. Este disco, a pesar de tener algunas buenas canciones, es sin duda uno de los que menos gustan a los fans, precisamente porque perdió bastante de la esencia del grupo a manos de Navarro. Esa sinergia que se respiraba en el disco anterior se había esfumado.

Y aquí empieza la tercera (y mejor hasta la fecha) etapa del grupo. Y es que con la marcha de Navarro, como resultado de muchas disputas de egos entre él y Kiedis, nuestro siempre querido Flea (qué sería de nosotros sin él) decidió ir a ver a John Frusciante, quien acababa de salir de rehabilitación y se encontraba en un muchísimo mejor momento mentalmente. El bajista le ofreció volver a la banda, a lo que John, algo ruborizado y con ojos brillantes, le dijo que le parecía una idea genial. Y ahí, señoras y señores, con este regreso del maestro de las cuerdas en su mejor momento, con el bajista también recuperado de una mala racha, con Anthony también tratado en rehabilitación y con Chad dando la calma y coherencia al grupo, nació en 1999 el que es considerado por muchos el mejor disco de la historia de Red Hot Chili Peppers. Este año sale, nada más y nada menos, que CALIFORNICATION. Así, en letra grandes, porque no hay otra manera de poner esta obra de arte.

¿Pero se acaba aquí todo lo bueno de esta banda? En el artículo que os comenté al principio se menciona que Red Hot Chili Peppers no han hecho nada bueno desde Californication. Se atreven a decir que excepto unos cuantos sencillos, no han vuelto a hacer un disco bueno. Por lo que achacan la ingente cantidad de entradas vendidas en esta nueva gira a la simple nostalgia de los fans sobre un grupo que lleva, según su humilde y pésima opinión, más de una década en decadencia. ¡JÁ!

Voy a hablaros de qué ha ocurrido con el grupo desde entonces… y es que en 2002 los Chili Peppers sacan un discazo llamado By the way. ¿Qué puedo deciros de este álbum? Lo siento, no soy objetiva. Quizá en energía es más flojo que el anterior, siendo este más tranquilo, más sobrio, aunque con perlitas tan cañeras como Can’t stop. Pero encontramos una calidad musical, una mejora vocal en el cantante, unos acordes de Frusciante, un bajo quizá algo más suavizado de Flea, pero unas letras increíbles. Digo que no puedo ser objetiva porque, por alguna razón que no podría describir, este es mi disco favorito del grupo. No quitaría ni una canción, ni un acorde, ni una palabra. NADA. Para mí es PERFECTO. Soy consciente de que esta opinión no es general y admito que quizá tenga que ver con el hecho de que este fue el primer disco que compré de ellos y el que más he trillado. Aquí fue donde ya me enamoré perdida e incondicionalmente de la voz de Anthony y de la guitarra de John. Canciones que llegan al alma como Universally Speaking, Dosed, Don’t forget me, Tear, Venice Queen; canciones tan divertidas como Can’t stop, Cabron u On Mercury. Esos coros de Frusciante, mucho más presentes que en Californication. Lo siento, para mí este disco es toda una delicia para los oídos. Y para que veais si estaban en forma o no, os dejo un vídeo del que para mí es el mejor concierto que han dado en la historia del grupo: Irlanda, Slane Castle. Ojo al solo que se marcan Frusciante y Flea tanto antes de la canción como en el solo en sí de la canción. Yo es que cada vez que lo escucho… en fin… aquí es donde podría pararme a explicar el término creado por los fans “frugasm”, pero no quiero ser soez, así que daré por hecho que me entendéis.

(como curiosidad os contaré que por mi cumpleaños un amigo  me regaló este concierto grabado por él, que lo tenía original, en un DVD pirata cuando cumplí 19 años. Unos años después pude comprarme el DVD original)

Pero avancemos cuatro años más, porque en mayo de 2006 los Red Hot sacan su octavo disco, Stadium Arcadium. Si os soy sincera, para mí este es el disco más infravalorado del grupo. Mucha gente lo criticó porque era más tranquilo, menos funky (evolución que el grupo ya venía siguiendo). Pero no puedo estar menos de acuerdo con las críticas. Esto es un señor discazo. Y mira que es  difícil sacar un buen disco siendo tan extenso como es, ¡porque este es un doble disco! El Stadium Arcadium traía dos discos diferentes, Mars y Jupiter, cada uno con 14 canciones (28 en total). Fue pensado en realidad para ser lanzado como una trilogía de discos que irían saliendo cada seis meses; pero finalmente se quedó como un solo disco doble. Como anécdota, os contaré que mi motivación fue absoluta cuando unos meses después de su lanzamiento me regalaron este disco por mi 18 cumpleaños y vi que una de las canciones se llamaba She’s only 18. ¡¡Porque obviamente Anthony Kiedis había escrito esa canción pensando en mí!! Pero ya en serio, la calidad musical y de composición que tiene este disco es impresionante. En esta época Kiedis alcanza un nivel vocal bastante más alto. En su faceta más mística, crea unas letras muy profundas, siendo este disco todo un viaje astral. De hecho, sobre el título, dijo: “Stadium Arcadium proyecta una especie de ensueño en el que los seres humanos nos proyectamos en el universo y el universo se refleja en nosotros y de ahí viene la inspiración”. El bajo de Flea vuelve a tener algo más de la presencia que se había perdido un poco en By the way. Y si hablamos de la guitarra… Aquí John Frusciante se pone mucho más experimental, porque él puede hacer lo que quiera. Nuestro amigo “Trickfingers” se marca aquí una composición a la guitarra descomunal, por no hablar de los solos que se marca en los conciertos en esta época. Para mi gusto, es la etapa en la que el grupo estaba en lo más alto. Os dejo aquí la que para mí es el mejor ejemplo de una canción que no deja de subir y subir hasta que cuando acaba te ha dejado en un éxtasis absoluto. De verdad, fijáos en cómo va aumentando. De hecho, os aconsejo que en cuanto terminéis de escucharla, volváis a poner el principio para que notéis mejor aún la diferencia. Pero sobre todo, por favor, fijáos en el minuto 4:20, porque yo en ese momento muero...

Lamentablemente, aquí concluye esta etapa de oro del grupo, porque en 2009 nuestro dios John Frusciante decide marcharse de nuevo del grupo, esta vez para trabajar más en solitario, ya que ese mismo año sacó el que para mí es su mejor disco en solitario: The Empyrian; disco que os recomiendo encarecidamente si os gusta la calidad musical y queréis un maravilloso viaje astral a través de la música. Os dejo la primera canción de este disco, que a pesar de ser una canción muy larga y no tener letra, os juro que soy incapaz de no escucharla entera:

Recuerdo perfectamente que en la Nochevieja de ese año me acababa de enterar de la noticia. John se había ido y aún no se sabía si iban a reemplazarlo o si el grupo se retiraría. Recuerdo aquella noche, en la Plaza de la Merced, en el centro de Málaga, a todo el mundo de fiesta y a un antiguo amigo y yo sentados con las caras largas hablando de este tema. Os prometo que tengo ese recuerdo y esa sensación grabados a fuego en la memoria.

Pero el grupo no se rindió. Siguieron adelante con la que pensaron que sería la mejor opción. Había un guitarrista jovencito (unos 30 años en esa época) que había colaborado mucho con ellos, que era muy amigo de John, le encantaba trabajar con el grupo y se llevaba genial con ellos. Frusciante y él incluso habían sido componentes de otra banda llamada Ataraxia, que sacó tan solo dos discos en 2004 y 2007 respectivamente. Y fue así cómo Josh Klinghoffer pasó a ser el nuevo guitarrista oficial de Red Hot Chili Peppers.

En 2011 sacaron el disco I’m with you, un disco con algunas canciones realmente buenas. Un Flea mucho más poderoso al bajo y que se atreve con otros instrumentos como el piano y letras buenísimas. La verdad, le tengo mucho cariño a este disco porque fue el que  me permitió por fin ir a un concierto cuando hicieron la gira. El 15 de diciembre de 2011 conseguí asistir al concierto de mi grupo favorito en Barcelona, concierto en el que por cierto me desmayé en la última canción (Give it away). Pero oye, al menos fue ya al final. Así me emocioné…

No es un gran disco, ya que además el productor, Rick Rubin, no tenía muy en cuenta a Josh y la guitarra no destaca en absoluto. Pero tiene algunas canciones realmente buenas como Monarchy of roses, Meet me at the corner, Annie wants a baby,...

Tal fue la imposibilidad de trabajar juntos de Rubin y Klinghoffer, que para su siguiente disco, The Getaway (2016), se buscaron a otro productor: Danger Mouse. Para mucha gente, este disco es mucho mejor que el I’m with you, ya que Klinghoffer pudo sacar más de sí sin Rick Rubin cortándole las alas. A mí, personalmente, este disco no me dice gran cosa. No me entendáis mal, no es mal disco. Pero no me transmite nada en absoluto.

En estos años pasaron algunas cosas importantes como que en 2012 los Red Hot entraron en el Rock & Roll Hall of Fame, evento al que no asistió Frusciante, sino Klinghoffer, a pesar de ser un “premio” a la carrera del grupo. Os recomiendo ver el discurso que Flea dio en la gala, dedicándole unas palabras a Frusciante e incluso a Slovak. Si es que no puedo amar más a este hombre…

En 2014 además cumplieron el sueño de actuar en la gala de apertura de la Super Bowl, actuación que hicieron junto a Bruno Mars y que fue bastante criticada por no tocar en directo…

La verdad, no os voy a decir mucho más de la etapa Klinghoffer, porque no da más de sí y quiero llegar ya al meollo de la cuestión. A la actualidad. A LO NUEVO.

Y es que tras algunos rumores que nadie creía, el 15 de diciembre de 2019, el perfil de Instagram de Red Hot Chili Peppers publicó una imagen de letras blancas sobre fondo negro que todo fan de la banda tiene grabada en la retina. En serio. Si conoces a algún fan de la banda, pregúntale dónde estaba cuando vio esa imagen, seguro que se acuerda:

Así, en un mismo mensaje, en una misma imagen, nos enterábamos todos de que la banda se despedía de Josh Klinghoffer con un bonito mensaje de agradecimiento por los diez años en el grupo y, al mismo tiempo, que JOHN FRUSCIANTE VOLVÍA A LA BANDA.

En fin… yo estaba sola en casa. Y me puse a llorar. Y tuve que llamar por teléfono para compartirlo porque estaba al borde del ataque de histeria. Os lo juro. Así de fan soy, qué le vamos a hacer.

El revuelo que esto creó es indescriptible. Os recuerdo que la última vez que Frusciante había vuelto a la banda, fue cuando sacaron el que se considera el mejor disco de la historia de Red Hot. Y tras dos discos bastante decepcionantes, nos encontramos con esta noticia. ¡Éramos tan felices! John volvía, iban a grabar un nuevo disco, iban a hacer gira, todo iba a volver a ser como antes. Pero, ¿qué pasó? Pues pensad, si esta noticia salió en diciembre de 2019… Sí, eso es. Nuestro amigo Covid-19 nos jodió la marrana pero bien, ya que a causa de la pandemia se suspendió TODO. Ya no podían grabar disco, ni ensayar, ni tocar. Y muchos nos vinimos muy abajo pensando que quizá esto hiciera que John volviera a irse antes de hacer nada.

Sin embargo, entre 2020 y 2021 no pararon de ir soltando rumores y dejando pistas de que algo se estaba cociendo. Y antes del verano de este mismo año se confirmó que finalmente nuestros cuatro chicos favoritos se habían juntado por fin para grabar el nuevo disco. Y nuestro hype aumentó considerablemente tras declaraciones de Rick Rubin, que volvía a ser el productor del grupo:

“Si te gusta ‘Stadium Arcadium’, te podrá gustar este”

“Estamos terminando su nuevo álbum ahora mismo, de hecho. Frusciante ha vuelto a la banda y es increíble. Fui al primer ensayo, al que me invitaron después de que John se reincorporara a la banda y me hizo llorar. Fue realmente emocionante ver a esos tíos de nuevo juntos porque han hecho muy buena música durante muchísimo tiempo juntos, y me golpeó de una manera realmente emocional”

Y así es como volvemos al comienzo de este artículo en el que os comentaba qué ocurrió cuando en septiembre vimos el vídeo en el que anunciaban ya la nueva gira, que dará comienzo en junio del próximo año.

Y ahora que os he puesto en contexto, ahora que sabéis en qué punto se encuentra el grupo y en qué estado de expectación estamos los fans, siendo quizá uno de los momentos más épicos del grupo, ¿de verdad pensáis que las entradas han volado por pura nostalgia hacia 1999? En absoluto. Los fans estamos deseando escuchar lo nuevo, estamos deseando ver de qué son capaces estos cuatro al juntarse de nuevo, qué podremos encontrar en este nuevo disco. Muchos nos emocionamos al saber que por fin vamos a poder ver en directo una actuación con nuestro cuarteto favorito, con John “trickfinger” Frusciante a las cuerdas, con un reencuentro con el que  muchos casi ni nos atrevíamos a soñar. Nada de nostalgia, lo que queremos es mirar al futuro y que esta banda nunca deje de juntarse y seguir creando magia haciéndonos emocionarnos, hacernos viajar y hacernos dar saltos como nadie.

En este artículo del que os hablaba, apenas citaban a John Frusciante, siendo para mí la principal razón de que esta gira y este nuevo disco haya creado tantísima expectación entre el público. Porque esa sinergia, esa magia, esa energía que desprenden estas cuatro personas cuando se juntan ha vuelto, y ahí está Rick Rubin para ponerlos en lo más alto y regalarnos un disco y una gira que va a ser de lo más especial. Así que a esos que escribieron semejantes memeces, les dedico esta canción, porque nunca, NUNCA, hay que olvidar a nuestro dios John Motherfucker Frusciante, por muchas veces que se vaya: 

 

Videos:
Red Hot Chili Peppers - Breaking News out of the KHOT News Room!
Red Hot Chili Peppers Under The Bridge Saturday Night Live 1992
Red Hot Chili Peppers - Californication - Live at Slane Castle
Red Hot Chili Peppers - Wet Sand - Live at Fuji Rock Festival
Before the Beginning
Discurso de Flea - 2012 - RHCP Rock & Roll Hall Of Fame
RHCP - Don't Forget Me LIVE (Frusciante is incredible !)

Artículo realizado por Cristina de la Torre

viernes, 12 de noviembre de 2021

The Player Crow 1: Kena Bridge of Spirits

¿Qué tal mis queridas aves paseriformes? Mi nombre es Elías Santos y a partir de hoy me pasaré por aquí para hablaros de videojuegos. Concretamente lo que haré será completar todo aquel juego que me llame la atención, sea novedad o no, y os traeré mis impresiones. No soy periodista de videojuegos ni pretendo hacer análisis exhaustivos, solo soy un apasionado del medio que lleva viciándose desde que tiene uso de razón. Así que la idea es simplemente haceros llegar la opinión personal de un videojugador normal y corriente, y si luego eso os sirve para descubrir algún título o para salir de dudas de si comprar un juego o no, mejor que mejor. Hablaré de las cosas que más me llamen la atención de cada obra, señalaré algunos pros y contras y, por último, me mojaré diciendo si lo recomiendo.

No me enrollo más, vayamos al lío y recordad que «es mi primerito día»...

KENA: BRIDGE OF SPIRITS (PS5, PS4 y PC)

Mi historia con Kena se remonta al evento de revelación de PS5 donde hizo su primera aparición. Allí se mostró parte de la artillería que se venía hacia las actuales consolas de Sony, y os seré sincero, Kena fue uno de los que me conquistó desde el minuto uno. Primero porque se trataba de una nueva IP y eso es algo que, ya de entrada, siempre es de agradecer dada la saturación de secuelas que existe en el mercado. Y segundo, su precioso estilo artístico me enamoró de inmediato. Solo por su ambiciosa puesta en escena ya merecía la pena seguirle la pista, pero claro, cuando se trata de videojuegos hay que intentar no dejarse llevar solo por la fachada. Un apartado gráfico molón nunca asegura que automáticamente ese juego vaya a ser divertido de jugar, por lo que hay que intentar tener siempre un mínimo de cautela. Si además te enteras que los que andan detrás del proyecto son un equipo que solo hizo cortos de animación y, lo más importante, no tenían experiencia con videojuegos, las dudas se acrecientan. ¿Sería Kena simplemente un juego bonito de ver? ¿Su gameplay estaría a la altura o sería algo simple y descuidado? Te invito a que me acompañes para averiguarlo. 

Ember Lab es un estudio indie formado por unas 15 personas, se fundó en 2009 como estudio de animación y hasta ahora solo habían hecho cortos animados para publicidad de marcas conocidas. Es con Kena cuando decidieron cambiar de rumbo y lanzarse hacia la industria del videojuego. El resultado es un título que nos propone una aventura ligera con mucho sabor de la vieja escuela, un videojuego que mezcla combate, plataformas, puzzles y exploración de una manera super satisfactoria y que posee reminiscencias a clásicos de Rare o a la saga Zelda. Después de haberle metido casi 20 horas y completarlo todo al cien por cien, os puedo asegurar que Ember Lab ha cumplido con nota en su primera incursión en el mundo de los videojuegos. Pero desarrollemos un poquito más todo esto para los que aun tengan dudas.

Como os comentaba al inicio, lo primero que entra por los ojos del juego es obviamente su apartado visual. Su estilo cartoon, medio Pixar y medio Studio Ghibli, y su cuidada parte técnica hacen que todo luzca de maravilla. Asombra lo que han conseguido siendo tan pocos pero sin duda aquí es donde más se podían lucir, puesto que este apartado era el punto fuerte del estudio. Es una pasada, consiguen una ambientación preciosa y mágica donde te dan ganas de perderte de inmediato. Y sobre todo mola mucho sus múltiples influencias japonesas, estoy seguro de que serán un plus para todo aquel que se anime a probar el juego y le guste esa cultura.

Y es que, pasando ya al nivel narrativo, el juego se apoya bastante en las creencias sintoístas. Es todo muy espiritual y ligado con la naturaleza por lo que tiene sentido esa alusión al mundo oriental en todo momento. La propia Kena es una especie de guía espiritual que, con ayuda del poder de su báculo, se encarga de orientar a las almas perdidas que nos vamos encontrando. ¿La excusa? En el bosque ha ocurrido algún evento desconocido que está matándolo todo, además las almas de los que mueren se corrompen y se niegan a marcharse, volviéndose bastante agresivas. Nuestra protagonista comienza ya en plena acción aunque la historia no iniciará de verdad hasta que Kena llegue a la aldea más afectada. Allí tendrá que esforzarse al máximo en su cometido: alcanzar el santuario de la montaña que sería donde aparentemente ha empezado todo. La misión se presenta difícil pero lo bueno es que no estará sola, se topará con unas pequeñas criaturas llamadas Rot que se acabarán convirtiendo en una parte esencial de nuestra aventura. ¿Mola la historia? Si os soy sincero es lo que menos me ha terminado de convencer. Cumple para un juego de este tipo pero bajo mi opinión no es donde el juego brilla más.

Todo lo anterior se traduce en un gameplay de aventura en tercera persona, que al inicio parece sencillo pero que poco a poco va tomando mejor forma, sobre todo gracias a la inclusión de nuevas mecánicas y habilidades. El ejemplo perfecto para entender esto es el combate, al principio parecía muy básico pero a medida que vas mejorando el árbol de habilidades del personaje, y te van saliendo enemigos que requieren distintas tácticas para derrotarlos, te vas dando cuenta de que es un combate bastante currado y divertido de jugar. El esquema es un poco como un Soul: golpe rápido, golpe fuerte, bloqueo, esquiva y un muy útil arco para atacar a distancia. Además, contamos con la ayuda de los Rots que para actuar necesitarán que rellenes una barra de «valor», con ella al máximo dejarán de asustarse y atenderán a tus órdenes. Estos pequeñines además de socorrerte en combate también te harán subir de nivel y serán útiles a la hora de resolver sencillos puzzles.

Pero no todo será luchar, el juego posee un alto componente plataformero y lo que más me ha gustado: mucha exploración. El título anima a que constantemente curiosees cada rincón con coleccionables, cofres, zonas secundarias, pequeños retos, o caminos bloqueados por los que más tarde podrás pasar con la habilidad/herramienta necesaria. Encima el mapa, aunque no es un mundo abierto, es bastante generoso. Hay una zona central; la aldea, que actua como nexo para conectar todas las demás zonas, de esta manera te permiten volver a cualquier sitio a pesar de que el juego sea totalmente lineal. Si eres de los que le gustan explorar, simplemente lo vas a gozar.

Otra cosa que me gustaría destacar es la música. Ésta cuenta con partituras originales, memorables y muy acordes con la ambientación o lo que esté ocurriendo en pantalla en ese momento. Sobre esto último he notado, especialmente en los combates contra los jefes —peleas variadas y desafiantes—, que había una intención de que algunas notas o fragmentos musicales coincidieran con ciertos movimientos y situaciones que el jefe realizaba. El resultado está muy bien llevado, quedando todo sorprendentemente cohesionado y coordinado. Me sorprendió cuando lo percibí. 

Realmente lo único que no me ha gustado de su apartado audiovisual es la decisión que han tomado con las cinemáticas. Las han creado a menos fotogramas por segundo (fps) de los que corre el gameplay y se nota mucho cuando hay un cambio. El juego te permite jugar a 60fps (solo en su versión de PS5 y PC), entonces estás jugando con imágenes super fluidas y de repente se inicia una cinemática, que ni siquiera se renderiza en tiempo real, y te choca porque se nota que va a muchas menos imágenes por segundo. Entiendo que ha sido una decisión artística para acercar las cinemáticas más a lo que es el lenguaje cinematográfico, de hecho me apostaría la mano derecha a que los vídeos van a 24fps como en el cine, pero el resultado te saca totalmente de la experiencia. Tratándose de un videojuego donde la fluidez lo es todo creo que aquí tomaron una decisión muy desacertada.

Por último, os comentaré una cosa más que me dejó una sensación agridulce. En el juego tenemos a nuestra disposición una serie de habilidades que se van desbloqueando con la historia. Estas mecánicas enriquecen y le dan mucha variedad al gameplay, cuando las desbloqueas todas y el juego te propone situaciones donde tienes que utilizarlo todo junto para avanzar la diversión aumenta muchísimo. Desgraciadamente esto solo ocurre en el tramo final, para mi gusto algunas habilidades tardan mucho en salir. En éste punto yo lo que hubiera hecho es habilitar esas mecánicas mucho antes o diseñar más secciones donde se pudieran explotar. Al final sientes que hay ideas muy buenas que quedan un poco desaprovechadas por tardar tanto en salir.

En resumen, Kena: Bridge of Spirits es un videojuego bastante notable y divertido que te hará disfrutar como un enano, sobre todo si te gustan las aventuras lineales con sabor de la vieja escuela. Además sale a mitad de precio ofreciendo una durabilidad bastante aceptable (15/20 horas si vas a por todo). En mi opinión, tal y como decía más arriba, Ember Lab ha hecho un gran trabajo. Cada apartado de su ópera prima está muy cuidado. Hay alguna cosa que se podría haber pulido mejor pero sin duda han sacado un señor juegazo. Definitivamente es una obra que recomiendo si te gusta el género.

Lo mejor: Todo lo relacionado con la exploración, su apartado artístico, la música, su sistema de combate, el diseño de niveles, los numerosos jefes o los Rots que irremediablemente te enamorarán.

Lo peor: La historia es efectiva pero muy simple. Que las cinemáticas vayan intencionadamente a menos fps que el resto del juego. Algunas habilidades son muy chulas pero se usan poco.

TRAILER:


DATOS:

Titulo: Kena Bridge of Spirits
Desarrollado por: Ember Lab
Plataformas: PS4, PS5 y PC
Fecha de lanzamiento: 21/9/2021
Precio: 39,99 €
Nº de Jugadores: 1 jugador
Formato: Digital (Saldrá en físico el 19 de noviembre)
Idioma: Voces en Inglés y textos en español 

Portada: Emberlab.com / Fotos/Capturas de Pantalla: Elías Santos
Trailer:
Kena: Bridge of Spirits - Gameplay PS5 y FECHA con subtítulos en ESPAÑOL | PlayStation España

Análisis realizado por Elías Santos

miércoles, 10 de noviembre de 2021

Vuelo Ilustrados 17: ¿Miedo a la oscuridad? ¿Yo? (Magali Le Huche)

Ya han pasado estos días festivos, en los que nuestros niños y niñas, así como adultos variopintos, han dejado de lado sus miedos, y se han dedicado en cuerpo y alma a la creación de sus terroríficos disfraces, para salir a la calle cual mamarrachos y mamarrachas felices. Mira que nos gusta un sarao.

Pasada la resaca, seguramente muchas de las personas con hijos e hijas, habrán notado que al menos, los días posteriores a estas fechas, los chiquillos, a pesar de habérselo pasado como locos, han tenido más pesadillas de lo normal, o simplemente han empezado a aflorar miedos que antes no tenían. Es completamente normal, no todos los días en su pequeño mundo, debe ser muy común ver a un payaso ensangrentado, o un adulto pegando tiros ficticios disfrazado de soldado del tan de moda juego del calamar.

Por ello, hoy estoy encantadísima de traer una nueva colaboración a mi sección Vuelos Ilustrados, con una editorial especializada en libros infantiles ilustrados. En la editorial Kókinos predominan las historias a favor de una infancia sana, todas ellas editadas con muchísimo cariño, pero, sobre todo, cargadas de respeto por esta etapa tan fundamental para el resto del recorrido vital de los niños y niñas.

Como decía, gracias a la editorial Kókinos y este ejemplar, conseguiremos superar los miedos a la oscuridad, con un cuento nada convencional.

Hoy os traigo:

¿Miedo a la oscuridad? ¿Yo?

SINOPSIS:

En este cuento, página tras página, Clara va desafiando las sombras y los ruidos de la noche. Pero lo mejor de todo: con una Tablet o un smartphone, podrás entrar en el cuento, animarlo y ayudar a Clara a ser más fuerte que sus miedos.

¡Tienes en las manos un libro mágico!

FICHA TÉCNICA:

Autora: Magali Le Huche
Editorial: KÓKINOS
Nº de Páginas: 22 páginas
Encuadernación: Cartoné
Fecha publicación: 12-09-2018 
ISBN: 978-84-17074-20-3

RESEÑA:

El futuro ya ha llegado, y viene en forma de libro. Permitidme que me ponga profunda, pero en mis tiempos no había este pasote de libros.

Nos encontramos ante un cuento infantil animado y, ¿qué quiere decir esto? ¿Animados son todos? Pues que este cuento está diseñado para ser leído con una Tablet o un smartphone. Eso no quiere decir que no se pueda leer de igual modo, sin ayuda tecnológica. Es un añadido más, y una muy buena forma de iniciar a los pequeños a la lectura. 

A pesar de la era digital en la que vivimos, no hay nada comparable como el tacto, el olor, y la sensación que te produce pasar una página, sin saber que te espera al otro lado. Por eso me parece una idea estupenda, aunar lo tradicional con lo actual, y de esta forma, enganchar a las nuevas generaciones.

La editorial Kókinos apuesta por este tipo de libros, y ya dispone de unos cuatro ejemplares animados, que, tras la descarga en su app gratuita, los niños pueden interactuar con los personajes de las historias, y hacer muchísimo más entretenida si cabe la experiencia.

En ¿Miedo a la oscuridad? ¿Yo?, conoceremos a Clara, una niña que se despierta en plena noche con mucha sed. Al estar todo completamente oscuro, el miedo se apodera de ella, pero es tanta la sed que tiene, que decide hacer de tripas corazón e ir ella solita hasta la cocina.

En su recorrido hasta la cocina, pasará por diferentes estancias de la casa, donde todas ellas aparentemente, están plagadas de fantasmas y monstruos, esperando un pequeño despiste para devorarla. Clara, que es una chica muy intrépida, se armará de coraje y a golpe de un simple clic, encenderá la luz de cada una de las habitaciones que la llevarán a su ansiada cocina. Cuando la luz está encendida, ella misma es consciente, al igual que los pequeños lectores, que todas esas sombras, tan solo eran imaginaciones suyas.

Lo mágico de este cuento interactivo es que, a través de la Tablet, podremos ver como se mueven los objetos, escucharemos sonidos aterradores, abrir y cerrar grifos, muebles y un largo etcétera, que harán las delicias de los niños y niñas, que, como Clara, tienes una imaginación desbordante.

Las ilustraciones de la autora Magali Le Huche, son simples y con colores planos, pero no por ello menos graciosas. En este caso no creo que sea necesario recargar el dibujo en sí, ya que la gracia de lo que vemos, reside en los objetos ocultos, y de esos hay muchos, en cada página.

Aparte de la originalidad del cuento animado, me ha gustado muchísimo el hincapié que hace la autora sobre la independencia infantil, y como promueve la valentía en los niños y niñas, para que afronten sus miedos. 

Es cierto que he leído alguna que otra crítica del libro, hablando sobre que hay páginas que dan miedo, pero nada más lejos de la realidad. Si se lee bien, y se enseña que no hay nada que temer, al igual que Clara, los niños se divierten mucho. Bajo mi punto de vista es un libro muy recomendable para niños de 2 a 5 años.

Una aventura muy tierna que los animará a controlar esos terrores que les bloquean, pero que, a pesar de todo, y como en la historia, siempre tendrá un abrazo reconfortante de su mamá, papá, o cualquier familiar, que vele por sus sueños.

En casa ya he perdido la cuenta de las veces que lo hemos releído para ayudar a Clara a llegar de nuevo a su cama sana y salva.

SOBRE LA AUTORA:

Magali Le Huche nació en París en 1979. De pequeña quería ser cantante y bailarina, pero finalmente decidió estudiar dibujo en la escuela Arts Déco de Estrasburgo. Ha ilustrado más de cuarenta libros para niños, algunos de los cuales ha escrito e ilustrado. Su serie de cómics Jean-Michel le caribou fue adaptada a dibujos animados. En Flamboyant, además de Elétrico 28, escrito por Davide Cali, ha publicado Berta Buenafé está triste y Las sirenas de Belpescão, que en 2006 ganó el prestigioso premio francés Prix Sorcières al mejor álbum ilustrado. 

Fotos: Editorial Kókinos

 Reseña escrita por María Pizarro

lunes, 8 de noviembre de 2021

¡Un nuevo cuervo se une a la familia!

El 30 de noviembre cumplimos un año más, exactamente ocho años. Ese día de 2013 se publicó el primer número de la revista de Vuelo de Cuervos. Desde entonces ha llovido mucho, hemos evolucionado durante estos años, y superando diferentes etapas, algunas mejores y otras no tanto. Ahora Vuelo de Cuervos está totalmente enfocada en el blog, desde que ya hace más de un año saliera la última revista. Como sabréis tenemos un equipo de personas que nos brindan su talento y profesionalidad de manera desinteresada, y que sin ellas sería imposible ofreceros todo el contenido os traemos cada semana.

En el plano personal, somos una familia que trabaja muy bien juntos y que constantemente está en comunicación, para mejorar y crecer. Por eso, nos hemos ido abriendo a nuevos caminos y adentrándonos en territorios desconocidos, pero sin salirnos del perfil y los valores que nos han definido o representado siempre.

Desde ahora vamos a introducirnos también en el territorio de los videojuegos. Es cierto, que en el pasado se ha hecho algún artículo donde se hablaba de algunos muy conocidos y sus respectivas historias. Sin embargo, con nuestra nueva incorporación vamos a ir mucho más allá. Me complace presentaros a nuestro nuevo cuervo:

Elías Santos

Elías es diseñador e ilustrador, experto en concept art y amante de videojuegos. Su trabajo en el blog, va a ser desarrollar análisis muy completos en una sección propia llamada «The Player Crow», sobre los que el mismo vaya probando desde su amplia experiencia.

Y para concluir, solo darle la bienvenida a Elías, que desde ahora eres un cuervo más. Confío que te sientas a gusto, y que tus artículos lleguen a un gran número de lectores y gamers.

--
Jesús Mesado Sánchez

viernes, 5 de noviembre de 2021

DESPLUMANDO DIRECTORES/AS - Toma 6: Christopher Nolan - Acto II

Ilustración realizada por María Pizarro / artmpizarro.com

¿Qué tal amigos humanos? ¿Habéis dormido bien? ¿Seguisteis mis consejos en la anterior parte? Si no es así, puede que esta segunda entrega sobre Cristopher Nolan puede que solo sea un mal sueño. Ya sabéis de lo que os hablo…o no. Pues sí, ha llegado el momento de no andarnos con rodeos y entrar de nuevo en la cabeza de este genio del séptimo arte.

Tiempo, momento o instante, en el que este que os grazna siempre ha definido como ideal para seleccionar a sus amigos de verdad o simplemente, dar la importancia necesaria a aquellos que lo rodean y clasificar sus mentes entre merecedoras de su tiempo o no.

A aquellos que amáis profundamente a Nolan, ya sabréis de qué película os hablo, Inception. Mi adorada Origen, la que para mí es la obra maestra de este director y la historia más increíble que yo he disfrutado en el cine como ave de mal agüero que me considero en el género de ciencia ficción ¿Será porque fue su primera película con un guion e historia completamente original por su parte? Hecha desde los cimientos y hasta el último ladrillo por el mago de la mente en la gran pantalla, escrita, producida y dirigida.

Compartiendo ideas con Leonardo Di Caprio en el set de rodaje.

El reparto, nuevamente abrumador, con un Leonardo Di Caprio en la cumbre de su estrellato y dejando de lado desde hacía tiempo su estatus de cara bonita de Hollywood y amor de las quinceañeras y por supuesto, nuevamente vapuleado en aquella ocasión por la meca del cine. Le acompañaron en el reparto Elliot Page, Joseph Gordon-Lewitt, Ken Watanabe, Tom Hardy, Marion Cotillard, Cillian Murphy, Tom Berenger y Michae Caine.

¿Qué sentirías si alguien fuera capaz de robar dentro de tus sueños? Tener la capacidad de entrar en la mente de una persona mientras duerme y extraerle sus ideas, claves de bancos o cualquier material que pueda hacerte millonario al vendérselo al mejor postor. Piratería empresarial en tu propio cerebro y para colmo, poco a poco, descender más aun y entrar en el sueño de otro sueño.

Sí, este es el momento en el que muchos dejan de ver la película porque se han perdido y yo pienso: «Vale, con este solo voy a poder hablar de la puta telebasura de turno o de vídeos chorras».

Di Caprio interpreta a un prófugo de la ley, Dom Cobb, que tiene esa capacidad de la que hemos hablado anteriormente gracias a un dispositivo de tecnología militar que induce a ladrón y víctima al sueño de este último con sedantes en un escenario creado por el Arquitecto de esa subconsciencia (Elliot Page, entrenada en un principio por Cobb y que sirve al director para introducirnos en este mundo complejo y fascinante). Una historia por la que debes dejar los móviles apagados y meterte dentro como si no existiera nada más, pues un solo despiste puede acabar contigo. Como a los protagonistas, que necesitan un tótem para saber que están dentro del sueño y todo lo que están viviendo no es real, algo parecido a Matrix. La maquinaria de este entramado de espionaje industrial es tan perfecto, que la víctima no llega a saber jamás que lo que estaba haciendo era simplemente un sueño y como tal, los sueños casi siempre se olvidan.

Con Murphy y Di Caprio intercambiando conceptos.

Pero…¿Y si en vez de robarla, implantamos una idea? Eso es lo que da el nombre a esta obra de arte. En esta ocasión, la víctima es mi adorado Peaky Blinders, Cillian Murphy, su competidor Watanabe y el resto del reparto son del equipo de Di Caprio. Aquí es cuando poco a poco Nolan se empieza a enamorar artísticamente de Hardy de una forma especial, ya lo veréis más adelante.

El caso es que este último trabajo le servirá a Cobb para saldar sus cuentas con la ley y poder reunirse con sus hijos, que están a cargo de su suegro y mentor ( Michael Caine). Aquí es donde aparece el personaje más inquietante de la trama, la mujer de Cobb, la actriz francesa Marian Cotillard, que da un miedo y una pena que te cagas por igual, se llama Mal Cobb y no es casualidad, pues siempre aparece cuando Dom menos se lo espera para desbaratar sus planes. Si quieres saber más, ve la película y no seas más “cotilla-rd”. Vale, a ver si vuelvo vivo al nido después de este chiste tan malo. Mi rata voladora ya estará pensando en darme una pedrá.

Lleno de acrónimos, por ejemplo entre las iniciales de los nombres de los personajes. (Doom, Robert, Eames, Arhtur, Mal y Saito= DREAMS. Referencias mitológicas en nombres de personajes como Ariadne que en la antigua Grecia ayudó a Teseo a salir del laberinto de Minotauro ¿Di Caprio en los sueños de esta trama? Sin 3D y sin apenas CGI, sí, aunque lo veáis inviable a estas alturas de la…película. El alud que ocurre incluso en la fortaleza de los sueños, fue real.

Evidentemente, esta producción no se iba a ir de rositas sin ningún Óscar, pero a pesar de que fue nominada a 8 estatuillas de las que se llevó 4 a la mejor fotografía, la mejor mezcla de sonido, la mejor edición de sonido y los mejores efectos visuales; perdió en dos de los premios importantes, mejor película y mejor guion original. Claro…para qué coño van a nominar al mejor director de las dos últimas décadas a este hombre.

Como es lógico, la banda sonora de esta maravilla corrió a cargo de nuevo de las manos de Hans Zimmer. Como anécdota final, decir que el guion tuve una longevidad de 8 años hasta que vio la luz, os podéis hacer una idea de la complejidad del mismo y por qué hay personas que con una sola neurona no pueden entender esta, esta…mira, se me caen las plumas solo de intentar pensar un calificativo que clarifique aún más la grandeza de este film. Pero claro, si crees que el rubio cincuentón se quedó ahí, es que sabes muy poco de sus capacidades artísticas. No te marches aun.

Saltamos dos años en el tiempo. Estamos en 2012, el famoso año en el que todos los seres vivos de este planeta nos íbamos a ir a la pu… Es el momento de cerrar la mejor trilogía hecha del caballero oscuro y demostrar al mundo porque para Nolan, Hardy no es solo una cara bonita. Hablamos de Batman: El caballero de la noche asciende, The Dark Knight Rises. El reparto se repite y cae sobre los actores anteriores en los papeles más característicos: Christian Bale como Batman, Michael Caine como Alfred, Gary Oldman como Gordon y Morgan Freeman como Fox. Las caras nuevas las ponen Anne Hathaway en el papel de Selina Kyle (Catwoman), Tom Hardy como Bane y Marian Cotillard como la hija de Ra’s al Ghul.

Bale y Hardy escuchan atentamente al director en la escena de su brutal enfrentamiento

En esta ocasión, Batman se ha retirado obligatoriamente, pues se le busca por la muerte ocho años atrás del fiscal Dent. Sus lesiones no se recuperan como antes debido a la edad y siente que ya no es lo que era. Se convierte en un huraño es insoportable amargado que solo su fiel Alfred aguanta. Sin embargo, el mercenario Bane le obliga a salir para que evite destruir su ciudad. Basada en los cómics donde aparece el terrorista y dos más, Nolan teje un argumento definitivo en el que vemos a un Bruce Wayne desolado por sus incapacidades y empezamos a descubrir las dotes interpretativas que Nolan vio desde un principio en Hardy. En una ocasión dijo que solo con sus ojos, era capaz de atrapar la esencia de la escena en concreto. En esta ocasión fue algo más, pues a pesar de su intimidante máscara, Tom Hardy se puso como un Hulk pequeño. Con el tiempo, el actor llegó a confesar que lo pasó bastante mal durante y después del rodaje por las secuelas físicas que le dejó, debido la carga tan brutal de trabajo que tuvo que hacer para preparase de aquella manera. Esta claro que no se juntaba mucho con Bale, pues todo sabemos de lo que es capaz este último por interpretar un papel.

Nadie puede escapar de sus comentarios, ni siquiera la Catwoman Hathaway

Existieron homenajes ocultos, pero a la vista de los más avezados en estas lides, como el guiño a Robin, el eterno ayudante de Batman en la figura del sargento que interpreta Joseph Gordon-Levitt que repitió trabajo con Nolan tras Origen y un homenaje al propio Charles Dickens en su Historia de dos ciudades que giraba alrededor de la revolución francesa y que fue parte de la inspiración para el guion de este espectacular director.

Las localizaciones fueron muy variadas, desde Bucarest y su casco antiguo, Londres, Glasgow, Pittsburgh o Michigan. Sin olvidar la impresionante Wollaton Hall de Nottingham elegida como la Mansión Wayne.

Los trajes sufrieron alguna que otra modificación, pero lo más destacable era la máscara de Hardy como Bane, cuya utilidad servía al personaje para aliviar su dolor en antiguos combates a través de un potente analgésico…lo bien que le hubiera venido a Bruce en esta historia tras su desafortunada caída en la película anterior cuando salvó al hijo de Gordon y terminó con la rodilla hecha un Cristo. El traje de Selina Kyle como Catwoman no era nada del otro mundo, pero al menos mucho más discreto y elegante que el de la peor Mujer gata de la historia, Halle Berry. Su actuación fue muy normalita y a pesar de su beso con Bale vestido de Batman, no pudo superar el ego que en su día tuvo y declaró Nicole Kidman al decir que fue la única mujer que ha besado a Batman en el cine, ella sin disfraz y él vestido...evidentemente voy a obviar hablar de esa película en esta sección para no insultar a mi adorado director.

Hasta Bruce Wayne se deja aconsejar...

Zimmer repitió de nuevo con Nolan como el encargado de dar vida a la banda sonora y Howard esta vez declinó la oferta. Me da la sensación que vio que iba a hacer de carabina entre dos hombres que ya eran algo más que director y compositor, dos amigos y enamorados artísticamente el uno del otro.

Como anécdota trágica, quisiera añadir lo que ocurrió alrededor del estreno de esta película y no precisamente la polémica de adelantar los trailers al inminente estreno por entonces de The Avengers de Marvel sino lo que ocurrió en Aurora, Colorado. Esto lo sé por un familiar volador que tengo en América que vino de vacaciones el siguiente verano en uno de esos transatlánticos al más puro estilo de Drácula. En unos cines de la ciudad, un pirado se coló en pleno estreno con una máscara de gas a vos en grito diciendo que era el Joker y se llevó por delante la vida de doce personas. Una espeluznante historia que aún recuerdo con pavor y que me deja las plumas tiesas al pensar la facilidad que tiene el ser humano en perder la percepción de lo que es real o no…a más de uno le vendría bien una peonza.

La crítica, a pesar de aquel suceso, puso a la película en un buen lugar. Para mí, personalmente, supera a la primera de la saga y el dúo creado por héroe y villano es brutal. Su discurso es duro y tiene un trasfondo tan real como por desgracia, la vida misma en la que hoy navegáis los humanos con vuestras obsoletas políticas. Hay partes en las que a veces entendí a Bane al querer destruir Gotham desde los cimientos y volver a reconstruirla como quería hacer Ra’s al Ghul en la primera entrega. Si fuera humano, ya me habría colado en el congreso de los diputados a dar un sustito a más de uno.

La taquilla y venta en casa fue también muy buena en términos generales, superando a otras películas de superhéroes y a pesar de no recibir ningún premio como su antecesora, si fue un digno cierre de la que, vuelvo a decir, es la mejor saga escrita y dirigida por nadie hasta ahora del murciélago de Gotham, por mucho que lo haya intentado Snyder con su Batfleck (y eso que todas ellas están producidas por Nolan).

Bueno y ahora, nos vamos a ir al lugar en el que este pajarraco se siente el ser más ínfimo del mundo y en el que el terror se apodera de cada una de sus articulaciones cuando a los cineastas les da por hacer historias relacionadas con el espacio. Sí, hablamos de Interestelar, una nueva obra maestra del director inglés. En esta ocasión el protagonista ese el hombre por el cual jamás se me dará bien el inglés y cuyo apellido siempre pronuncio de mil formas distintas, Matthew McConaughey, Anne Hathaway que repite junto a Michael Caine, la esplendorosa y talentosa Jessica Chastain y Matt Damon.

Hasta el mejor de los directores, escucha la opinión de sus actores.

¿Qué nos propone el director? Algunos la consideran un distopía, nada más lejos de la realidad, pues hoy en día el ser humano sigue luchando inútilmente en buscar un mundo habitable al que poder joder como lo estamos haciendo con nuestra querida Tierra. Es el año 2067 y los recursos naturales de la tierra cada vez son más escasos, se sigue luchando por la colonización de otros mundos. Cooper nuestro protagonista, antiguo ingeniero y piloto de la NASA, vive en una granja con sus hijos y su suegro, a través de su hija pequeña interpretada magníficamente por Mackenzie Foy que será Chastain en el futuro, descubre una anomalía en la gravedad por culpa de lo que su hija cree que es un fantasma en su habitación. Ello le lleva con unas coordenadas a un lugar secreto de la NASA donde se encuentra con su antiguo profesor (Michael Caine). Este le confiesa que hace 48 años surgió en Saturno un agujero de gusano del que sospechan, es el puente a nuevos mundos habitables por el hombre. Aquí el mundo de Cooper cambia para siempre y termina despidiéndose de su hija en una escena brutal que nos deja la caída de un libro de la librería muy extraño. No os digo más a aquellos que no habéis osado ver esta maravilla de film.

La brutalidad con la que se refleja la variación del espacio y tiempo por culpa del viaje de nuestro protagonista y su nuevo equipo con dos extravagantes  robots es desoladora. Particularmente me recordó a esa comparación tan injusta de la edad de nuestros perros o gatos con respecto a sus dueños, pero más aterradora. La belleza de cada uno de los fotogramas de la película acompañados de nuevo por el inconmensurable arte de Hans Zimmer, hacen de esta película una delicatesen para los ojos y los oídos. El terror se rezuma de diferentes formas, no solo en ese espacio agónico al que tanto respeto le tengo, sino sobre todo en la pérdida de tus seres queridos y la imposibilidad de volver atrás en el tiempo.

Una imagen que parece más de este tiempo por la mascarilla de Chastain.

Un guion concienzudo y muy elaborado por parte de los hermanos Nolan y reforzado con la ayuda inestimable de un experto en la materia de la física teórica como Kip Thorne. Se te cae el pico al suelo literalmente con cada dato que nos desgranan en cada minuto de la misma y nos hacen de nuevo pensar en la importancia de cuidar nuestro planeta, rodeado todo de esa pátina que se llama amor y salpicado de conceptos que al común de los mortales se nos escapa, pero nos hace aprender sobre el universo que nos rodea.

Sería muy injusto si alargara el argumento de esta historia para convenceros de verla, pues hay que disfrutarla cada segundo y como en todas las tramas de Nolan, pestañear lo menos posible. Hay escenas que no se pueden explicar, yo al menos no puedo, simplemente se deben disfrutar, pues el director, a pesar del rigor matemático que Thorne proporcionó al equipo audiovisual, quería que su realismo no hiciera que el espectador se perdiera por muchos vericuetos teóricos. Para mí lo consiguió, y os lo dice un pajarraco con el cerebro del tamaño de una nuez. Tal fue su dedicación, que incluso se cultivaron 500 acres de maíz para las escenas de la granja del protagonista y después las vendió sacando beneficios ¿Cómo os quedáis?

Con un calzado especial en uno de los exteriores donde se grabaron las imágenes de otro planeta.

A parte del premio de la Academia de 2014 a los mejores efectos visuales que os comenté, fue nominada a la mejor banda sonora, el mejor sonido y el mejor diseño de producción no solo en este certamen.

En definitiva, Interestelar es una nueva experiencia para los sentidos de todo aquel que ame el cine y la capacidad de terminar con el cerebro abarrotado de sensaciones, sentimientos, datos que marean y te hacen pensar en lo ínfimo que somos, la fragilidad que viste nuestros sentimientos y la necesidad que tenemos de cuidar de un planeta que no queremos ver que poco a poco se está muriendo por nuestra culpa.

2017, Nolan estrena su primera incursión en el cine bélico y se aleja de todo lo que hasta ahora había experimentado a través de la mente humana para mostrar una parte de los hechos reales que acontecieron en la llamada Operación Dinamo. Dumkerque nos cuenta como se llevó a cabo la evacuación por parte del gobierno británico de más de 400.000 soldados en Francia tras ser invadida por los Nazis en la Segunda Guerra Mundial.

El protagonista de esta historia real, escucha los consejos de su director.

Para muchos, entre los que se incluye este humilde acróbata del cielo, esta cinta parece un documental más que otra caso y no supimos captar la idea que en un principio tuvo el director. Tres formas distintas de ver el conflicto, las tres perspectivas desde las que se puede analizar y visualizar una guerra: mar, tierra y aire. Si a ellos añadimos la característica de un guion con poco diálogo, basado y enfocado en la experiencia de una visualización más inmersiva por parte del espectador, quizás podamos entender el valor que Nolan quiso darle a este hecho histórico en el que la desesperación por la supervivencia fue extrema.

La mayoría de los actores principales de esta película son desconocidos y los más habituales en la meca de cine pasan a un papel secundario, como el actor y director Kenneth Branagh o el “Depp” de Nolan, Tom Hardy que tiene la particularidad de que en esta película tampoco se le ve la cara como en su anterior participación como Bane en la tercera película de Batman y que fue el reclamo más curioso por parte de los críticos y que el director defendió con argumentos algo extravagantes, como lo que os conté anteriormente por la capacidad de Hardy de expresar todo con sus ojos de un forma diferente al resto de actores. El resto del reparto fue completado por jóvenes actores como Fionn Whitehead, Tom Glynn-Carney, Barry Keoghan, Aneurin Barnard, incluso el cantante Harry Styles y Jack Lowden, sin olvidar a nuestro querido Espantapájaros Cillian Murphy que repite en esta película y los veteranos Mark Rylance y por supuesto Michael Caine…al final voy a tener que retractarme con lo de Hardy y hacer al magistral actor británico de 88 años como el fetiche del director. Hoy día el director estará de luto, pues el pasado 16 de octubre, Michael Caine comunicó a los fans del séptimo arte que íbamos a tener que vivir el resto de nuestras vidas sin su talento nato, se retiraba definitivamente.

Con parte del reparto en la playa de Dumkerque.

Para mí, es la segunda película más floja de toda su filmografía, quizás porque esperaba la típica película épica llena de heroicidad, que no le falta en ciertos tramos de la misma, pero que carece de esos instantes en los que los bellos se te ponen de punta. Sin embargo, para muchos críticos de cine que algo saben más que este mal augurio negro, es la mejor de todas las que el director ha filmado. Es cierto que la cinematografía y por supuesto, la dirección, es espectacular si nos ceñimos a las bases fundamentales de lo que es mostrar una guerra desde otra perspectiva, sin olvidar de nuevo la banda sonora de Hans Zimmer, cuya capacidad ambiental te atrapa sin necesidad de llenar el ambiente de diálogos. Y que se convertía en su sexta colaboración con el inglés.

También hay que destacar un aspecto real de la historia en sí, y es el hecho de como Nolan trató de reflejar la capacidad del ser humano, no solo por sobrevivir, sino por la lucha contra la opresión e intentar salvar a todos los soldados posibles por parte incluso de civiles con sus barcos, como bien se ve en las escenas grabadas con el actor Mark Rylance haciendo de un simple pescador que intenta ayudar rescatando soldados y se cruza con el personaje de Cillian Murphy. Tampoco podemos obviar las escenas de avión de Tom Hardy sobre la playa, inolvidables.

Puede parecer que mis comentarios contradicen mi particular gusto por esta película, pero es que Nolan es capaz de hacerte disfrutar hasta con un vídeo de dos minutos grabando a un ratón comiendo queso. Grabar los exteriores de la película en la misma playa donde todo pasó, tuvo que ser algo muy especial para todos los actores y el resto del equipo, que se compuso hasta de 6.000 extras. Lowden y Hardy, los dos pilotos, apenas tuvieron contacto con el resto del elenco y se centraron en sus escenas sobre el aire de las playas de Dunkerque en simuladores especializados. Se acondicionó antiguos barcos, aviones, armamentos e incluso vehículos para dar credibilidad a las escenas, utilizando hasta un torpedero que estuvo en 1940 en aquella huida.

En definitiva, una apuesta arriesgada que la llevó al tercer puesto de las películas con mejor debut sobre la Segunda Guerra Mundial. Un 92 % de la crítica favorable y volcada con ella, cuyas 8 nominaciones a los Óscar fueron recompensadas solo en las categorías de Mejor sonido, Mejor edición de sonido y Montaje. Sí, otra vez se le volvía a escapar los premios a Mejor película y Mejor director. No sé qué tiene que hacer este hombre para que le den un premio individual. Al igual que no entiendo como esta cinta no se llevó el Óscar a la mejor fotografía, porque cada fotograma de la misma era como un lienzo que nos mostraba la belleza y el horror de la guerra al mismo tiempo en viñetas a color.

Y sí, a falta de que llegue un nuevo proyecto de este genio, nos vamos a meter de lleno en su última aventura. Una historia tan original como compleja que nos lleva de nuevo a la pregunta con la que empezamos este Desplumando directores número 6: ¿Qué coño acabo de ver? Tenet, un thriller con espías y viajes en el tiempo. Protagonizada por el hijo de Denzel Whashington, John David; por un vampiro de risa convertido en el futuro Batman, Robert Pattinson (cuya actuación me calló la boca), Elizabeth Debicki, Dimple Kapadia y de nuevo, sí Michael Caine y repite con Kenneth Branagh como el villano de la historia.

Compartiendo con John David una escena de Tenet.

Debo destacar varios aspectos de esta film de forma personal. Tenet es una película para disfrutar, si intentas entenderla, quizás te parezca una fumada muy gorda. Sí, sé que más de uno me dirá que como toda la filmografía del director, pero es cierto que esta es un pelín diferente e igual de compleja si nos metemos en el “maravilloso mundo de los viajes en el tiempo” y sus paradojas, aunque aquí se juega con ello al contrario. Se utiliza el pasado como base para adelantarse al futuro…ni yo mismo me he entendido y casi me caigo del árbol en el que estoy ahora mismo.

Vamos a llamarle, inversión en el tiempo. Imagina que eres un agente de la CIA, llamado “El protagonista” y participas en una operación encubierta para rescatar a un espía que ha sido capturado que tiene un artefacto extraño. Lo salvas de un ataque y terminas siendo capturado y te suicidas con una píldora de cianuro antes de decir nada. Pero, no estás muerto, todo era una prueba para entrar en una organización ultra secreta que lucha contra la que puede ser la próxima tercera guerra mundial, pero en el tiempo y de forma invertida.

Jugar con información y la capacidad  de ir al pasado para cambiarlo a tu gusto sin que nadie entienda nada en el presente, ¿terrorífico, no? Si lo piensas, en realidad es un recurso trillado, pero no de la forma en la que nos los plantea Nolan. Pues todo pasa en un transcurso corto de tiempo y delante de tus ojos, incluso con la posibilidad de perder la vida en cada secuencia y para colmo, marcha atrás. Evidentemente, se llevó el Óscar a los mejores efectos visuales.

A los que llegan del pasado se les llama invertidos y El protagonista, con la ayuda de la mujer del terrorista ruso (Debicki y Branagh, respectivamente) intentará detener a este para no provocar la destrucción del planeta a través de esos artefactos y una serie de algoritmos que se activarían para destruirlo todo si el ruso muriera. Habrá sorpresas que puedas intuir y otras que escaparan a tu comprensión. Otra fórmula que utiliza el director para que dejes tu puñetero móvil cuando estás viendo sus películas y no te pierdas detalles de la misma para terminar en un laberinto de ideas sin una posible salida.

Una historia a contrarreloj, pero al revés. Enrevesado y solo a la altura de la mente de un privilegiado como el director inglés y su séquito. En esta ocasión Zimmer no repite, simplemente por el hecho de que estaba inmerso en la  nueva adaptación de la antigua Dune de David Lynch. El encargado de dar forma musical a esta historia fue Ludwig Göransson que a pesar de tener que grabar los temas con cada uno de los músicos en sus casas por la pandemia del COVID-19, supo encajar las piezas perfectamente y captar el ambiente de una trama de espías y la atmósfera que necesitaba.

Personalmente, le doy un valor especial a esta última entrega del director por atreverse, en plena crisis sanitaria, a estrenar esta compleja fumada con tintes de ciencia ficción y arriesgarse como lo hizo a no recuperar el dinero invertido, ya que mucha gente no se atrevió a ir a los cines por miedo a pillar el bicho. Yo debo confesar que fui uno de ellos, a pesar de ser un bípedo con alas y no correr riesgos, decidí verlo desde la ventana de la casa de uno de nuestros lectores.

Sin duda, hasta ahora, lo más complejo que ha salido de la mente del director y que me gustaría volver a visionar muy pronto, ya que se grabó sin pantallas verdes ni efectos por ordenador. Imaginaos lo que fue grabar las escenas al revés para los actores.

Antes de terminar, os quisiera dejar una última nota. Ya se sabe cuál será el próximo proyecto del director inglés y que se basará en la vida del físico teórico y creador de la bomba nuclear Oppenheimer y que lo único que sabemos es que su papel será interpretado por el actor Cillian Murphy y que por desgracia, Zimmer no será el encargado de la banda sonora. Juzgad si el cast de Cillian no es genial.

Actor y Físico son como dos gotas de agua.

Por último, os quiero pedir disculpas a todos en general por lo poco objetivo que he sido en este artículo. Hablar de algo que me apasiona como el cine es muy emocionante, pero dar con la figura de uno de los directores que ha cambiado el panorama actual y futuro del cine, teniendo la oportunidad de hablar de su trabajo, mucho más allá de la persona, es todo un lujo. Por eso quiero dar las gracias a mis compañeros de Vuelo de cuervos por esta oportunidad y espero que estén satisfechos, ellos y vosotros por supuesto, con mi humilde opinión sobre la visión de las películas de este genio de Hollywood que debería de tener más de un Óscar en su haber como director.

No puedo cerrar este artículo sin expresar de nuevo mi más profunda admiración ante la nueva ilustración que acompaña este charlotada que os he graznado de la mano de nuestra artista María Pizarro, vuestra azabache alada y mi “rata voladora” en particular.

Por supuesto, emplazaros a una nueva entrega en la que los pecados capitales tendrán la culpa de mis desventuras, donde la lucha se hará insufrible entre juegos macabros e intentaremos hallar al asesino más escurridizo tras un curioso caso.

Hasta nunca y siempre, pequeños y grandes voladores.

 Artículo escrito por Óscar Lamela Méndez
Ilustración realizada por María Pizarro