viernes, 26 de noviembre de 2021

Vuelos Ilustrados 18: Mutafukaz vol. 1: Dark Meat City (Guillaume Renard)

Pues ya toca traeros nuevos cómics con temática un poco más para adultos, ¿No?

Está muy bien los valores que se les inculcan a los pequeños con los ejemplares que suelo reseñar, pero los mayores también necesitamos que nos den caña.

La editorial Dibbuks me mima, y sabe exactamente lo que me gusta. No hace mucho llegó a casa un cómic políticamente incorrecto, con lenguaje soez, y sangre salpicada en cada una de las viñetas que lo componen. Vamos, una auténtica maravilla para el deleite de mi persona, y para todo aquel que sepa apreciar una hostia bien dada.


Agárrense los machos, porque hoy comparto con todos ustedes, mis impresiones sobre:

Mutafukaz vol. 1: Dark Meat City

SINOPSIS:

¡Bienvenidos a Dark Meat City, la ciudad más grande de New California! Una metrópolis compuesta por infinidad de barrios que son controlados por distintas bandas callejeras. Angelino es un joven que comparte piso con su amigo Vinz en una de estas barriadas de mala muerte. Allí conviven con la delincuencia y el malestar, pero un día, mientras intenta ganarse el pan como repartidor de pizza, es atropellado y comienza a tener un terrible dolor de cabeza al que le acompaña un efecto secundario: empieza a ver que las sombras cobran un aspecto un tanto extraño. Lo que no sabe Angelino es que, por otro lado, el equipo de wrestling llamado Lucha Última, se verán envueltos en una encrucijada de proporciones bíblicas que puede suponer el fin de la Tierra tal y como la conocemos.

FICHA TÉCNICA:

Autor: Run
Editorial: DIBBUKS
Nº de Páginas:128 páginas
Ilustraciones: Color y B/N
Tapa: Blanda
Fecha publicación: 1ª Edición Abril: 2021
ISBN: 978841729496

RESEÑA:

Mutafukaz vol. 1: Dark Meat City, es el primer volumen publicado en España de una saga que tiene seis volúmenes en total. A parte de este ejemplar, también son conocidos el spin off, «Mutafukaz. 1886», «Mutafukaz. Loba Loca» y «Mutafukaz. Puta Madre». Este último lo guardo como oro en paño en mis estanterías, ya que, gracias a Puta Madre, conocí el delirante universo de Run. La editorial Dibbuks ya lo publicó en el 2019, en un álbum recopilatorio, donde veríamos una miniserie escrita por RUN, acompañada por los dibujos de Neyef.

En estas páginas conoceremos a nuestro marginado protagonista Angelino y a Vinz, su mejor amigo. Ambos se ganan la vida en un barrio de mala muerte situado en Dark Meat City, la ciudad más grande de New California que apareció después del Big One: un terremoto que destruyó parcialmente California.

Dark Meat City está contaminada, y plagada de pandillas a cuál más chunga, donde las ratas y las cucarachas son las amas de la ciudad.

La vida aparentemente se abre paso entre el caos, y como cualquier otro día corriente, Angelino se incorpora a su precario trabajo, y se dispone a entregar unas pizzas, cuando de repente es atropellado por un camión. Si bien el golpe no lo mata, después de ese día comienza a tener extrañas alucinaciones, que le obligan a visitar a un dudoso médico.

Todo cambia después de dicha visita, y de la noche a la mañana tanto nuestro protagonista como su gran amigo, serán perseguidos por un escuadrón de policías sin razón aparente.

Si os suenan las imágenes de este pequeño cabezón, o la historia en sí, puede que sea porque en 2017 se estrenó un film de animación que tiene el mismo formato gráfico que el cómic.

Esta película nace de una idea original de Guillaume Renard, (nombre real que se esconde tras el pseudónimo de RUN), y está dirigida por el japonés Shoujirou Nishimi. Juntos crean una mezcla de estilo anime franco/japonés, que sinceramente, me parece fascinante. No es de extrañar que ganara el premio de la MPTE japonesa a la Mejor Película de Animación. Os animo a verla si no lo habéis hecho, pero como recomendación, siempre os diré que el cómic es mucho mejor.

Las escenas de lucha mezcladas con el desconcertante humor del autor, forma un conjunto que, al margen de la trama, envuelve al lector hasta sumergirlo en un mundo violento, que esconde una brutal crítica social. Los excelentes paisajes urbanos nos harán conocer los diferentes choques de culturas entre las bandas que los componen, a cuáles de ellas más heterogéneas.

Viñetas estridentes a todo color cargadas de detalles, que contrastan con muchas otras en las que el blanco y negro será el predominante en algunas escenas. Run hace pequeños incisos a modo de voz en off, como si de una película de misterio se tratase, o adjuntará recortes de periódicos que te obligaran a esbozar una sonrisa. Esos pequeños detalles me fascinan, y también considero que pueden sacar del aletargamiento al lector, que no deja de sorprenderse página tras página.

Finalizada la historia, Run nos regala los primeros diseños y bocetos de algunos de los personajes, e incluso nos cuenta de su puño y letra, el proceso de creación de Mutafukaz. Es la primera vez que he visto en un volumen de estas características, fotografías del propio autor, que te ayudan a comprender el trabajo de campo que hay tras la publicación de este cómic.

Por si no fuera suficiente con todo lo que he mencionado, también veremos abundantes ilustraciones de otros artistas a modo tributo de nuestro protagonista Angelino.

Todo ello hace de «Mutafukaz vol. 1: Dark Meat City», un pack muy completo donde historia, calidad, y extras deberían ser el punto de inflexión para muchos otros autores a la hora de publicar.

Si te va Méjico, la lucha libre, las bandas, los marginados, las armas, las leches como panes, o incluso las cucarachas, este es tu cómic.

Encantada con Dibbuks que, a pesar del COVID, y demás obstáculos editoriales, sigue al pie del cañón, con ejemplares tan bien cuidados como este.

SOBRE EL AUTOR:

Grafista e ilustrador apasionado por la ciencia ficción, la cultura Z y la cultura popular latinoamericana, que ha triunfado como guionista de cómic en su propio sello, Ankama.

Fue durante cinco años director artístico de la célebre agencia multimedia Teamchman, donde fue un precursor de contenidos por Internet y trabajó en proyectos publicitarios para grandes marcas (Warner Music, Swatch, Adidas...). En 2002 su cortometraje Mutafukaz opération blackhead, anuncio del cómic del mismo título, dio la vuelta al mundo y obtuvo una nominación en el Sundance Film Festival de Salt Lake City. Desde 2006, RUN trabaja en la editorial francesa Ankama, donde ha publicado el primer tomo de Mutafukaz. En el año 2008 lanzó el sello Label 619, donde reunió a los peores crápulas del cómic, como Florent Maudoux o Guillaume Singelin. Su última obra es The Grocery, en 2015. 

Fotos: Dibbuks, Tebeosfera

Reseña escrita por María Pizarro

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